En la noche de este martes, una unidad de la línea 144 sufrió un hecho de vandalismo al recibir un impacto en una de sus ventanas. El episodio tuvo lugar en las calles Grandoli y Boulevard Seguí de la zona sur de la ciudad. Los trabajadores del sector evalúan medidas de fuerzas para las próximas horas.
Un nuevo episodio de violencia se da en Rosario, a 72 horas del trágico asesinato de César Roldán, el chofer de la línea 116 que murió el sábado por la tarde mientras prestaba servicio y circulaba de este a oeste por avenida Eva Perón.
A pesar que durante las primeras horas de este miércoles aún no había una decisión tomada, desde el gremio que nuclea a los colectiveros de corta y media distancia analizan volver a parar. Esto se debe a que no se cumplió con la promesa de garantizarles seguridad a la hora de circular tras el crimen de Roldán.
Comentarios