Carlos Jesús “Pelo Duro” Fernández, preso de alto perfil que cumple condena en la cárcel de Coronda, mandó a un adolescente de 16 años a balear un colectivo en Rosario por 50 mil pesos. El hecho ocurrió en los primeros días de este mes en la zona sur y de acuerdo a la acusación del fiscal Franco Carbone, entre la evidencia encontrada se encontraron pruebas de que el narco detenido buscaba que la situación policial tuviera impacto mediático.
De milagro -por la mala puntería del tirador- el ataque a tiros contra una unidad del 146 en la que viajaban el chofer y varios pasajeros, no terminó con un muerto: los disparos fueron cuatro y dieron contra los vidrios y la carrocería del colectivo, que circulaba cerca de las ocho de la noche el pasado 5 de septiembre por la zona de Spiro y Grandoli.
La audiencia imputativa por este atentado comenzó el pasado viernes. Y para este lunes se esperaba su conclusión. Al ataque a balazos encargado por “Pelo Duro” desde la cárcel lo llevó a cabo Ángel M, un menor de 16 años apodado “Soretito”, que fue detenido la misma noche del hecho y puesto a disposición de la Justicia de Menores.
Gonzalo Fernández Bussy es el juez que debe resolver la situación procesal de los imputados: además de “Pelo Duro” fueron acusados Damaris Betania “Pochi” Fernández, Kevin Alfredo Ramos y Brandon Gabriel Moreyra.
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