Luis Schiappa Pietra y Matías Edery, los fiscales de Criminalidad Organizada de Rosario realizaron una presentación para llevar a juicio oral y público al ex titular del Ministerio Público de la Acusación (MPA) de Rosario, Patricio Serjal.
En el documento ingresado están pidiendo 12 años de prisión e inhabilitación absoluta perpetua por haber organizado una asociación ilícita y por hechos de corrupción en el marco de una estructura ilegal dedicada al juego clandestino. Y a esto le sumaron una solicitud para que el juicio se realice en paralelo al de Guille Cantero por el ataque al casino por tratarse de dos causas relacionadas.
Para entender el por qué de este requisito hay que remontarse al inicio de la investigación que llevó a la imputación de Serjal, y también del ex fiscal Gustavo Ponce Asahad y del empleado judicial Nelson Ugolini, cuando se llevaba adelante la investigación del ataque al casino ocurrido en enero de 2020 y por el cual resultó asesinado el gerente bancario Enrique Encino.
Cabe recordar que junto al líder de los Monos, serán juzgados otras tres personas acusadas de ocupar distintos roles en la planificación y ejecución del atentado a la casa de juegos. Por eso para Schiappa Pietra “las pruebas son en común”. Y en esta línea, remarcó la importancia de “llevar a un mismo juicio a un fiscal regional y a líder de la principal banda narcocriminal de la región”.
“Se relacionan los fenómenos de criminalidad compleja y organizada con la corrupción y las problemáticas del crimen violento más cotidiano. Esta causa deja eso muy en evidencia”.
Para Schiappa Pietra y Edery “ hay evidencia que acredita que efectivamente Serjal junto con un grupo de funcionarios políticos y judiciales, construyeron una red de colaboradores que permitió que funcione una organización vinculada al juego ilegal muy próspera y que generaba mucho dinero que se repartía hacia distintos lugares”.
“Serjal tenía por misión permitir el funcionamiento de esa organización, favorecerlos a partir de entrega de información sensible desde dentro de la fiscalía. Daba cuenta de cuándo había allanamientos, cuándo había causas que podían comprometerlos de alguna forma y trataba de intervenir para que no se avanzara o que no prosperen esas investigaciones”.
Serjal, Ponce Asahad y Nelson Ugolini “formaban parte de esta organización que protegía al juego ilegal -cuyo objetivo era permitir que Peiti pueda seguir operando de forma ilegal el negocio- y se nutría de su dinero, entre otras cosas, para derivar a la política”, sostienen los fiscales. Y allí es donde aparece la figura del senador por el departamento San Lorenzo, Armando “Pipi” Traferri quien para los investigadores “operaba como jefe”.
El texto presentado, además expone que el día que las Tropas de Operaciones Especiales de Santa Fe ingresaron a allanar la casa de Ponce Asahad, “el por entonces fiscal dijo que tendrían que ir a la casa de Serjal y eso quedó grabado en las filmaciones”.
“Esto se debe contextualizar con los hechos que estaban ocurriendo, Para cuando se allanó a Ponce Asahad recién estaba circulando la versión de los nexos entre Peiti y funcionarios del MPA y Serjal aún no estaba vinculado, No obstante ello, Ponce desde ese primer momento ya relacionó a Serjal como parte necesaria del entramado que comenzaba”.
Ese fue el momento en que Serjal reseteó su WhatsApp con el fin de borrar datos -conociendo el funcionamiento de las investigaciones- cinco veces en menos de un mes.
Schiappa Pietta también se refirió al dinero que manejaban estas figuras y confirmó que se trata de “volúmenes muy grandes” y aseguró que tienen “no sólo a Peiti explicando cómo es que aportaba el dinero sino que también el propio Ponce Asahad reconoció que lo recibía”.
En la causa ya fueron condenados en abreviados en los que reconocieron su responsabilidad el ex agente de la policía Alejandro Torrisi, el empresario Leonardo Peiti y el ex fiscal Ponce Asahad. Junto a Serjal, que estuvo alojado en el Órder y ahora permanece en domiciliaria por su estado de salud, los fiscales piden cinco años de prisión para Nelson Ugolini, ex empleado de Gustavo Ponce Asahad.
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