La Universidad Nacional de Rosario anunció la presencialidad total desde marzo de 2022 en todas sus facultades. Esa medida impulsó, como tantos años atrás, la llegada de miles de jóvenes de localidades cercanas a la ciudad con el objetivo de estudiar. Sin embargo, el mercado inmobiliario no se expandió en el último tiempo, por el contrario, se comprimió. Lo poco que hay, en tanto, se ocupa en menos de cuatro días.
Las razones son diversas, expresaron especialistas en el tema, aunque coincidieron en tres puntos determinantes: la Ley de Alquileres, el contexto económico nacional y la inflación. La normativa, que entró en vigencia en 2020, extendió el mínimo de los acuerdos a tres años y la actualización del valor bajo un cálculo promedio entre los índices IPC (Índice de Precios al Consumidor -inflación-) y las variaciones del RIPTE (Remuneraciones Promedio de los Trabajadores Estatales).
Las unidades deseadas por los estudiantes y gente joven escasean en Rosario. Según un informe del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz los monoambientes y departamentos de un dormitorio tuvieron escaladas en sus valores de un 114% y 58,6%, respectivamente.
De esta manera, alquilar en la ciudad implica unos $20.600 o $28.000 para esas viviendas, siempre dependiendo de las zonas y sin considerar las expensas, que comienzan en los $2.000.
Andrés Garibolidi, presidente del Colegio de Corredores Inmobiliarios de Rosario, señaló en diálogo con RedBoing que “el contexto que estamos teniendo con respecto a vacancias de departamentos monoambientes y de un dormitorio para estudiantes es sumamente escaso”. “Hay muy pocas unidades disponibles. las que se van desocupando por alguna razón se reocupan en un término de tres o cuatro días”, sentenció.
“Es una demanda importante, de características similares a las que tuvimos en 2019 ahora que se ha garantizado la presencialidad”, añadió el especialista.
La Universidad Nacional de Rosario, por su parte, optó por tomar cartas en el asunto y puso en marcha a disposición de sus alumnos el edificio de diez pisos que fuera destinado anteriormente al apart hotel Pringles. Allí se podrá albergar a 150 estudiantes. El rector Franco Bartolacci firmó el contrato de locación del inmueble, donde funcionará la primera residencia estudiantil universitaria en Santa Fe al 1470, la semana pasada.
“Hemos podido avanzar mucho en estos últimos años con la política de comedores, hoy ya tenemos uno por cada área geográfica. Hemos podido avanzar mucho con la política de becas, hay prácticamente una beca por cada situación problemática, pero nos faltaba dar el paso de garantizar a nuestra comunidad un espacio de alojamiento para quienes más lo necesiten”, expresó, y resaltó: “Eso se logra con una política de residencia que comienza hoy en nuestra Universidad y aspiramos se multiplique los próximos años”.
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