Este miércoles, los empleados de Garbarino volvieron a movilizarse en la puerta del local que la empresa posee en el centro de Rosario ante la falta de respuestas. Los trabajadores señalan que se les adeudan los sueldos de abril, mayo y junio, en los cuales solo recibieron lo correspondiente al Repro.
En medio de una nueva crisis y tras cambiar de dueños en 2020, la compañía sigue cerrando sucursales a lo largo y ancho del país, dejando a cientos de trabajadores al descubierto. El año pasado, la firma fue vendida por la familia fundadora al empresario Carlos Rosales, presidente de la aseguradora PROF y protesorero de San Lorenzo de Almagro. Según informaron, la operación fue con pago de salarios atrasados y una inversión de $2.000 millones en un período de 18 a 24 meses.
Desde que comenzó el conflicto en el mes de mayo, la compañía, el Sindicato de Empleados de Comercio y el Ministerio de Trabajo de la Nación mantienen audiencias en busca de destrabar el conflicto. Sin embargo, Daniel Arroyo, trabajador de la empresa, expresó a RedBoing: “Hace 5 meses que están en tratativas, pero no nos dan una noticia clara. El Gobierno se reúne con ellos todos los miércoles y van a cuarto intermedio, parece que se juntan a tomar el té”.
Desde la empresa afirman que hay un grupo inversor con capitales extranjeros que está interesado en hacerse cargo de la cartera. Sin embargo, no han comunicado nada y más de 4.000 empleados esperan por cobrar sus sueldos.
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