El joven Samuel Miqueas Medina, alias “Gordo Samu”, fue acribillado en la noche del martes en Rosario a bordo de un VW Polo blanco que manejaba en la colectora de Circunvalación, en la zona norte de la ciudad. Fueron 16 disparos que sorprendieron también a los vecinos, que llamaron a la policía. Apenas llegaron los agentes se encontraron con otro joven que estaba al lado de la víctima, aunque ileso: once de los tiros dieron en la puerta del conductor.
El caso quedó a cargo del fiscal Luis Schiappa Pietra, que deberá investigar quién y por qué le disparó a Medina. Lo que se sabe hasta el momento es que habrían actuado dos hombres desde dos motos y que el arma utilizada podría haber sido una ametralladora. A este último dato lo dio a conocer el Secretario de Seguridad de la provincia, Omar Pereira. Sobre Medina, el dato es que había sido condenado en juicio abreviado por exhibirse con armas de guerra junto a Luciano “Lucho” Cantero y el cantante Zaramay.
Aquel hecho fue en 2021, en Rosario. Y para algunos sirvió como presentación en sociedad de una nueva camada de la banda Los Monos. Es que el “Gordo Samu”, de apenas 24 años, era pariente de Guille Cantero, líder de la banda narco criminal y preso en la cárcel federal de Marcos Paz, cumpliendo numerosas condenas. Medina era novio de Paula Bay, la hija de una pareja que había tenido Vanesa Barrios antes de empezar a salir con Cantero.
Otras balaceras y una muerte en enero de 2024
La novia de Medina, Paula Bay, había sido imputada por el fiscal Federico Rébola en una causa por extorsiones contra un local comercial de Mendoza y Matienzo, en la zona oeste de Rosario. Esa esquina fue el epicentro de disputas y balaceras con la banda Los Monos apareciendo como una sombra detrás de esos hechos violentos.
Además, el nombre del “Gordo Samu” apareció vinculado con una gomería que había sido atacada en dos oportunidades en enero de este año. Por una de esas balaceras, falleció un vecino que ocasionalmente pasaba por el lugar
Los posibles móviles del crimen
¿Cuál podría haber sido el móvil del crimen? Aunque es muy prematuro arriesgarlo, porque la investigación recién comienza, sí se puede decir que Medina era uno de los hombres “extramuros” con más cercanía a la cúpula de Los Monos. Por el dato de que en el auto en el que murió había entradas para el partido que un rato antes de la ejecución jugaron Central y Vélez en Arroyito, hay quienes sugieren que los asesinos podrían haberlo seguido a la salida de la cancha. El horario y la zona en la que se produjeron los disparos permiten pensar en esa posibilidad. El fiscal Schiappa Pietra deberá rastrear cámaras e indagar si esta muerte puede tener alguna vinculación con un violento hecho ocurrido hace poco más de un mes, cuando le dispararon varias veces a Andrés “Pillín” Bracamonte, al final de otro partido del canalla en su estadio.
¿Se podría romper la calma que lleva Rosario en los últimos meses en materia de homicidios? En la última década, a cada hecho violento como el de anoche le siguió una zaga de balaceras y muertes resonantes. La ejecución del “Pájaro” Cantero en 2013, por ejemplo, abrió una racha de crímenes impactantes cuando el entorno del que era hasta ese entonces el líder de Los Monos buscó vengar ese episodio. No obstante el contexto ahora parece ser otro: los líderes narco están todos detenidos y los controles en las cárceles vienen siendo mucho más estrictos que los que había hasta fines del año pasado.
El gobernador Maximiliano Pullaro, que presentaba este miércoles en Rosario una serie de inversiones en cloacas y obras de infraestructura, fue consultado por Red Boing sobre la muerte de Medina. Y dijo: “El objetivo es que se trabaje para esclarecer cada uno de los hechos. Y en este caso la justicia debe trabajar, con una investigación que recién se inicia, por la muerte de una persona que había tenido una condena por exhibición de armas de fuego. Pero déjenme decir algo, porque es interesante que los rosarinos conozcan mi opinión. Nunca van a ver a este gobierno cantar victoria con la baja de violencia. Hubo una baja importante de los homicidios en la ciudad, del 75 por ciento. Pero para nada estamos conformes. Hay que seguir ajustando los procedimientos, en la calle, en la cárcel”.
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