Desde principios de año se viene hablando de la conformación del frente de frentes opositor en la provincia de Santa Fe. A pesar de los múltiples intentos por conformarlo anticipadamente, los tiempos se fueron dilatando y hoy la situación está llegando a un límite. A pesar de los anuncios de una foto el próximo 21 de septiembre, se volvió a postergar el tan ansiado lanzamiento para muchos y, según lo que parece, va a llegar al borde del cierre de listas la formalización. Por lo bajo todos lo aceptan, todos lo ven como necesario, pero nadie quiere ceder en una partida ajedrecística.
Ante el encuentro de una nueva mesa de Juntos por el Cambio provincial en Rosario, se anticipaba que el Día de la Primavera iba a haber foto de todos los partidos que pueden llegar a conformar el gran frente opositor. Al menos con eso especulaba el espacio liderado por Maximiliano Pullaro. Sin embargo, ante una reunión tensa y álgida, se terminó decidiendo postergar nuevamente la idea de mostrarse todos juntos.
Hay una visión concreta que quiere empezar a discutir un marco programático para llegar a febrero con discusiones saldadas. Por un lado el radicalismo, quien está cómodo con la idea por haber formado parte del Frente Progresista en el pasado y ser una de las piedras fundacionales de Juntos por e Cambio a nivel nacional. Pablo Javkin, por su parte, también se mostró predispuesto a avanzar, más allá de los matices que se han planteado, también por su pertenencia partidaria y su afinidad con distintos dirigentes nacionales.
Sin embargo, el PRO tiene una disputa interna que dilata la situación. Por un lado, la institucionalidad del partido, a cargo del diputado nacional Federico Angelini, necesita garantizar un pedido de los dirigentes nacionales: que quienes integren el frente de frentes sostengan la línea y los apoyos en los armados nacionales. Además, buscan seguridades para la repartija de poder dentro de este esquema provincial, siendo que la marca de Juntos por el Cambio fue la vencedora en el 2021.
Por otro lado, un grupo de dirigentes díscolos con la conducción partidaria local, buscó nuevos horizontes y se referenció con armados radicales, a pesar de la pertenencia con el PRO y sin bajar esas banderas. Apareció una foto en conjunto de quienes están bajo la línea de Pullaro -como Gabriel Chumpitaz y Gisela Scaglia, entre otros- y los que trabajan bajo el liderazgo de Julián Galdeano -Anita Martínez, Germán Pugnaloni, por mencionar algunos-, con la intención de mostrar fortaleza y llamar a la convocatoria amplia del frente opositor.
Por su parte, Angelini se fue a San Agustín este sábado y convocó a cerca de 400 dirigentes de toda la provincia, en un acto interno y territorial del partido, y sirvió como mensaje para marcarle la cancha a quienes buscan limar las bases de su conducción. De hecho, fue en ese marco en el que se anunció que el PRO va a tener candidato propio a gobernador y puede ser el lanzamiento del mismo Angelini para ese cargo, salvo que aparezca algún tapado.
Javkin y Galdeano vienen conformando un tándem político. También este fin de semana se mostraron juntos en la inauguración de una nueva plaza en B° La Carne y generó más especulaciones. La estructura del radical podría ser la que apalanque la candidatura del intendente de Rosario, siempre y cuando Carolina Losada no compita en la contienda provincial. Esa inauguración sirvió para una nueva foto que estuvo en los teléfonos de la política durante todo el sábado también.
Además, el Partido Socialista tuvo su acto de unidad, con los intendentes Emilio Jatón y Alberto Ricci incluídos, y desde Arroyo Leyes llamaron a construir una alternativa para la provincia. Son los otros que no tienen apuro en encontrar la foto ya mismo para el frente opositor, aunque por lo bajo las charlas están al rojo vivo y hasta se charla de la repartija de cargos gubernamentales y de jugadores que podrían competir en las distintas categorías, más allá del gobernador. Clara García es la referente y el diferencial que tiene el partido de la rosa, y buscarán utilizarla donde se garanticen dividendos para el socialismo.
Al PRO porteño no le cierre un frente, más allá del nombre, que no acompañe después de la contienda provincial la competencia a nivel nacional. Por otro lado, el socialismo y Javkin hablan de potenciar la mirada provincial para fortalecer las pujas con un futuro gobierno nacional, sea del color que sea. Y el radicalismo intenta mediar entre ambos espacios, como lo hizo desde el principio, para que se doble pero que no se rompa.
Los días transcurren y quienes vaticinaron un acuerdo sobre el cierre están ganando las apuestas. Mientras tanto, se consolidad las alianzas internas e intentan potenciar a distintos nombres sin mover mucho el avispero, ya que las encuestas y los gurúes de la política anticipan que quienes saquen la cabeza como candidatos hoy no llegarán con chances a las urnas del año próximo. El complejo escenario que ostenta el frente de frentes es el diagnóstico del caos producto de la alternativa concreta de ser gobierno desde el 10 de diciembre del 2023.
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