A poco más de tres semanas de la sorpresiva muerte del cantante y productor musical Ricardo Daniel Carías, más conocido como “La Tota Santillán”, la pericia reveló este martes que el fuego que provocó su fallecimiento se inició “sobre el cuerpo y prendas de la víctima, en el sector del baño” de la casa en la que vivía, ubicada en Castelar, en el partido bonaerense de Morón.
Según reveló el informe, en esa parte de la vivienda se encontraron dos fósforos quemados y un encendedor, además de la tapa de un recipiente y una botella etiquetada como “aguarrás“. Así, se descartó que el incendio haya sido consecuencia de un “accidente eléctrico”.
“El ígneo se produce por haber tomado contacto tanto con el cuerpo de la víctima como sus prendas con un elemento portante de llama libre, no establecido”, señaló el documento.
En este contexto, la Delegación de Bomberos de Morón, a cargo de la realización del informe, concluyó que “La Tota” se habría desplazado desde el baño hasta el sillón, en donde fue encontrado sin vida, por lo que las llamas llegaron al living por propagación.
Además, la pericia aclaró que “si bien en la escena se hallaron tanto fósforos como encendedor chispero, no es posible determinar si el origen del incendio fue causado por negligencia de la víctima o con el propósito de auto infringirse daño“.
Fueron los amigos y parientes del productor musical de 57 años quienes lo hallaron el pasado 23 de septiembre en su casa. El resultado de la autopsia detalló que Santillán falleció por “síndrome asfíctico”, que tenía el 90% de su cuerpo quemado y que no hubo signos de defensa.
“Estaba deprimido y angustiado por un conjunto de cosas, entre ellas, problema de trabajo, económicos y la condena que tenía por causa de género”, señalaron sus allegados. De todas formas, la causa de su muerte es investigada por el fiscal Patricio Ventricelli y no hay ninguna persona imputada por el hecho, a la vez que se descarta la presencia de un tercero que pudiera haber iniciado el fuego.
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