“Nunca pensé en parar”, dijo Hamilton delante de Toto Wolff. Con esas palabras el múltiple campeón presentó su nuevo monoplaza en Silverstone. El vehículo tiene un aspecto estilizado y ligero al máximo, con laterales mínimos, excavados por debajo y con una caída extrema hacia el motor. Además, la marca alemana decidió volver al plateado.
Ese regreso deja a la vista los volúmenes de la carrocería y la caída de los pontones buscando el efecto Coanda hacia la parte superior del difusor, como en años anteriores. En presencia de su segundo corredor, George Russell, Lewis añadió: “Es un privilegio estar en Mercedes, pilotar en la F1 y seguiré yendo al ataque, como siempre”.
Como se pudo apreciar en la presentación de ayer, desde el extremo del pontón hasta el suelo quedan 5 centímetros, lo que la convierte en unos 10 cm más estrecha que el Aston Martin o el Ferrari F1-75.
En el plano superior se aprecia una onda que deja el mayor espacio posible para airear los frenos por un lado y para el paso del aire al lado del morro por el otro.
Comentarios