Manolo Contini, empresario de la ciudad que se dedica a la fabricación y distribución de insumos de computación, se lanzó a la política solo. Nacido en Cortemilia, una pequeña localidad en la región de Piamonte, Italia, eligió Rosario para vivir desde sus 16 años, y ahora busca un lugar en el Concejo.
“Comencé a militar en 2014, en la época del cambio. Siempre apoyé la política, colaboré y me gustó. Fue una experiencia linda, pero en 2018 me di cuenta que no iba a pasar nada, que era más importante el interés en los bancos que la vida de las personas. Entonces me volví crítico de ese precioso y abrí un espacio solo, porque también la ciudad está abandonada”, destacó en Antes de Todo en Radio Boing.
En ese sentido, el precandidato a concejal afirmó: “Los políticos no se bajaron los sueldos, o aumentaron y no lo publicaron. En Rosario subió la TGI cuando los servicios no se utilizaron durante la pandemia”. Y añadió: “Tendría que haber un teléfono donde una persona llame y se debería solucionar en menos de una semana. En el centro y en todos los barrios las veredas están dinamitadas. No hay por qué”.
A su vez, en diálogo con Gabriel Pennise se definió ideológicamente: “A mí me gusta Lacalle Pou, me parece un tipo centrado, medido, liberal, un tipo de estado. En argentina soy de los fanáticos de Milei, de ir contra la casta política. Durante la pandemia estas personas no hicieron ningún esfuerzo, el esfuerzo lo hizo el pueblo”.
“Si entro al Concejo, mi prioridad número uno es reactivar el comercio. Devolverle un lugar clave al comerciante. Tenemos un proyecto para que las habilitaciones sean más rápidas. Hoy para abrir un negocio tenés que tener un ingeniero, un contador y un arquitecto”, concluyó.
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