Tras más de dos meses de audiencias, el juicio contra Esteban Alvarado ingresó en su etapa final. En este marco, los fiscales Matías Edery y Luis Schiappa Pietra dialogaron con la prensa en el Centro de Justicia Penal este miércoles al mediodía: “Estamos terminando los alegatos de clausura, exponiendo los hechos de asociación ilícita y lavado de activos. Ya probamos la estructura criminal de la que se valió Alvarado, que para nosotros funcionó al menos de 2012 a 2019, que tuvo el componenente de personas violentas, de un armado económico y de una protección estatal, que tuvo distintas formas y él fue aprovechando”.
A Esteban Alvarado se lo acusa de haber liderado una asociación ilícita, desde la cual se cometieron varios delitos entre fines de 2018 y comienzos de 2019, cuando fue detenido: si bien hay un largo recorrido en el mundo criminal del acusado, los fiscales Edery y Schiappa Pietra llevaron a juicio dos secuestros y posterior homicidio, balaceras y delitos económicos.
Y en ese marco, durante los debates, los fiscales revelaron pruebas de los antecedentes que le permitieron a Alvarado construir su organización: “Nosotros identificamos que al menos a partir de 2012 se desarrolló un emporio de empresas, vinculadas a Alvarado, que le permitieron dar apariencia lícita al dinero recaudado. Expusimos y alegamos también que la relación que él tenía con altas jerarquías policiales. Durante un tiempo funcionó como una especie de ‘influencer’, que incidía en el nombramiento de las cúpulas policiales, como cuando fue la designación de Sola al frente de la polícia provincial”, sostuvo Schiappa Pietra en diálogo con RedBoing.
El fiscal aludió así a un hecho ocurrido en 2012, durante la gestión de Antonio Bonfatti como gobernador. En ese momento se fueron dando varias salidas en la policía, por sospechas sobre las cúpulas de la fuerza. Y tras la defección de Hugo Tognoli, llega Cristian Sola. “No sabemos si a Sola lo nombraron porque Alvarado lo recomendó. Pero sí hay un audio del comisario ‘Chamuyo’ Di Franco -de quien se comprobó su relación con Alvarado- que tres meses antes del nombramiento de ese jefe policial, le pide a Alvarado que hable con otras personas para dar su beneplácito”.
Pasando en limpio: el Área de Drogas de la policía santafesina le pedía en 2012 a quien está acusado de ser líder de una banda narcocriminal, que jugase a favor del nombramiento de un comisario como jefe a nivel provincial de la fuera. Y tres meses después, ese comisario que recomendaba Alvarado, llegaba al cargo.
La relación con la política
El fiscal amplió: “Lo que se vio es que en 2012 y 2013 ya había pruebas de que Alvarado tenía una organización criminal sólida y relacionada con las jerarquías policiales, sobre todo con la División Judiciales que era la que en ese momento estaba investigando a Los Monos. Sabemos lo que pasó con Luis Quevertoque, que integraba en dicha época esa División y era al mismo tiempo parte del grupo de Alvarado. No sé si podemos en términos de imputación penal identificar una participación de un actor político relevente. Pero sí vemos que esta información estaba disponible: piensen que los Tribunales Federales ya en 2013 y 2014 sabían lo que estaba pasando y no avanzaron”.
Schiappa Pietra también sostuvo: “Lo que expusimos en el juicio es la capacidad de Alvarado de influir sobre los policías relacionados con la investigación de drogas en la provincia. Y que muchos de los policías sospechados terminaban sus carreras policiales en San Lorenzo. Muchos estaban relacionados con los comisarios Di Franco y Spoletti. En las escuchas a éste último, aparece el senador del Departamento”, agregó Schiappa Pietra.
La referencia fue hacia Armando Traferri, que en diálogo telefónico con el comisario Spoletti dijo: “Nosotros tenemos que preservarlos, no quiero que los vinculen conmigo”, al hablar sobre los policías sospechados de la vinculación con Alvarado. Ese audio fue uno de los que se escuchó durante las jornadas del juicio.
Otros delitos
Por su parte el fiscal Matías Edery indicó: “Hay muchos ilícitos vinculados a la organización. El narcotráfico no era la única fuente de ingresos de Alvarado. Había también robo de autos, nosotros contamos en el juicio que durante varios años se robaban cuatro autos por día durante cinco años. Había evasión fiscal, intermediación financiera prohibida. La justicia federal tiene además contra él causas abiertas por lavado de dinero, originado en el narcotráfico”.
Consultados los fiscales sobre la aparición del fútbol y las barras en el jucio, Edery dijo: “En algunas audiencias imputativas también hablamos de un robo de banderas de la barra de Newell’s con el que estuvo relacionado Alvarado. Eso no se trajo al juicio, pero es parte de lo que investigamos contra él”.
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