El fiscal Leonel Gómez Barbella, quien lleva adelante la investigación por el crimen de Lucas González, decidió citar este lunes a los amigos del jóven que hacía inferiores en Barracas Central a dar su testimonio como testigos. En este marco, el titular de la Fiscalía 32 buscará que antes de declarar sean contenidos por una psicóloga especializada del área de la Procuración dedicada a la contención de víctimas.
Por otra parte, los policías acusados por el asesinato aún no tienen fecha para presentarse a dar testimonio frente a las autoridades. En el mediodía de este sábado, los tres decidieron entregarse a la Justicia mientras esperan que se terminen de producir pruebas, como la pericia balística a las armas de los efectivos que llevará adelante la PFA y que permitirá determinar quiénes de los tres fueron los tiradores.
Los tres efectivos de la Policía de la Ciudad están acusados del delito de homicidio agravado por haber sido perpetrado por miembros de las fuerzas policiales abusando de sus funciones, imputación que prevé la pena de prisión perpetua.
Los acusados son el inspector Gabriel Isassi, el oficial mayor Fabián López y el oficial José Nievas, quienes se desempeñaban en la brigada de Sumarios e Investigaciones de la Comuna 4. El pasado viernes, los fiscales Gómez Barbella, a cargo de la fiscalía nacional en lo Criminal y Correccional 32, y Heim, habían pedido la detención por considerar el riesgo de fuga por parte de los acusados.
Lucas González murió por un disparo en la cabeza. Así lo confirmó el informe preliminar de la autopsia, que aclaró que el futbolista de 17 años tenía “una lesión de un proyectil de arma de fuego en el cráneo” y que perdió la vida por “una hemorragia meningoencefálica”.
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