Liverpool y Bayern Munich sellaron su clasificación a los cuartos de final de la Champions League

Liverpool y Bayern Munich ya están en los cuartos de final de la Champions League. El conjunto alemán barrió de la cancha al Salzburgo con un histórico 7 a 1. Por su parte, los ingleses sufrieron hasta el final en Anfield pero lograron pasar de ronda pese a perder por la mínima contra el Inter de Milán, equipo donde Lautaro Martínez fue titular e hizo el gol.

En el Allianz Arena, el Bayern tenía que mostrar su mejor cara luego de lo que fue el empate 1 a 1 en la ida ante el equipo austríaco. Sin dejar dudas, el equipo bávaro se adueñó por completo del partido y al cabo de 23 minutos ya goleaba 3-0 con un triplete de Lewandowski (dos de penal y uno de jugada). Apenas pasada la media hora, Serge Gnabry también se anotó a la goleada y el equipo bávaro se fue al descanso con una ventaja de cuatro tantos.

Ya en el complemento, Thomas Müller convirtió el quinto de Bayern Munich luego de un potente zurdazo. Para sorpresa de todos, RB Salzburgo logró descontar a través del recién ingresado Maurits Kjaergaard, quien fusiló a Manuel Neuer.

Sobre el final, Müller completó su doblete y Leroy Sané se anotó a la fiesta con un zurdazo. Así, los alemanes avanzaron a la siguiente ronda con un global de 8-2.

Por otro lado, el Livepool jugaba en su casa con la misión de defender el 2 a 0 conseguido en la ida ante el Inter. El primer tiempo tuvo tan solo tres emociones para destacar, aunque mostró a Inter muy lejos del descuento en la serie. Primero, a los 30 minutos, con el cabezazo de Joel Matip al travesaño y en la siguiente jugada, producto de un despeje previo al córner, el de Virgil van Dijk que rozó en la cabeza de Milan Skriniar y se fue otra vez por la línea del fondo.

Si bien no hizo nada relevante en el ataque, la única ocasión que tuvo el equipo de Simone Inzaghi, que en Italia ni siquiera pateó al arco, fue a través de un tiro libre de Hakan Calhanoglu que Alisson alcanzó a rechazar después de que la pelota le picara justo antes del cuerpo, a los 41.

Sin emabrgo, en el segundo tiempo y a partir de una jugada aislada, Lautaro Martínez enganchó una pelota desde afuera del área y clavó un verdadero golazo para que los italianos se pongan a tiro.

Luego, noventa segundos que fue lo que tardó Alexis en ver la segunda amarilla e irse al vestuario. Merecida, tanto por la entrada sobre Fabinho que le costó la segunda amarilla, como por la primera, en la que se llevó a Thiago por delante y que le pudo costar mucho antes la roja.

Así el Liverpool, con menos superioridad en los dos partidos que la mostrada en la Premier, avanza a cuartos por cuarta vez en los últimos cinco años, con el peaje de haber perdido en Anfield por primera vez esta temporada; el Inter tendrá que seguir buscando ese último impulso que les permita pelear contra los más grandes.