El “Tula”, el histórico militante peronista y líder de la barra de Central en los años ’70, es un abonado de los mundiales desde la edición de Alemania 1974. En las últimas horas, se lo había visto en silla de ruedas como epicentro del banderazo argentino por las calles de Doha, con su clásico bombo. Y este jueves, estaba siendo entrevistado por el Pollo Álvarez en vivo para canal 13, cuando la policía qatarí interrumpió la nota.
El episodio se transmitió en vivo: un hombre con la tradicional túnica árabe se acerca para que no muestre la zona en la que estaba grabando la nota, le pide credenciales, que apague la cámara y le exige que se vaya. Mientras tanto, otro policía tapa la cámara.
Más tarde, la esposa del periodista que fue censurado en Qatar publicó en su cuenta de Instagram un mensaje para llevar tranquilidad después del incidente, aunque explicando que había sido un momento de temor: “Fuera de chiste, se cagó en las patas simplemente porque aunque tuviera todos los permisos, está fuera de casa, estaba en vivo, no se entiende el idioma, es otra cultura y es censura cuando no estaba haciendo nada mal. Después se le pasó, se comunicó conmigo y hasta nos reímos y a los minutos lo volvieron a detener, imposible trabajar y disfrutar un Mundial así”.
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