Dólar

Dólar Oficial:$986 / $1026
Dólar Blue:$1110 / $1130
Dólar Bolsa:$1076.7 / $1078.1
Dólar Contado con liquidación:$1103.9 / $1104.4
Dólar Mayorista:$1004 / $1007
Opinión

La oposición puja por el nombre, la pertenencia territorial y mantener la llama viva

Los políticos entran en calor después del receso de enero, aunque ha sido muy movido, y debaten entre la empatía de los conflictos sociales que vivimos y el armado pre electoral que los posicione de cara a un intenso 2023. Mientras la oposición parece tener todo listo en cuanto a las urnas –sin enunciar definitivamente las candidaturas- el peronismo naufraga en las internas que lo han debilitado en los últimos 3 años. Las imágenes, el pragmatismo, lo nuevo o la experiencia y las gestiones, parte del análisis de todos los profesionales de la comunicación que miden y estudian qué conviene para salir a vender.

Esta semana se dio el puntapié inicial para la conformación del, tal vez, mal llamado frente de frentes. Así se instaló en la agenda y va a ser difícil cambiarle la nomenclatura después de casi un año de mencionarlo de esa manera. Los propios dirigentes que reniegan de esta denominación a veces cometen el pecado de mencionarlo así y hoy se plantean distintos nombres.

Será la primera tensión en la mesa conformada esta semana por los 11 partidos que integran el gran arco opositor. Estuvieron allí todos los sectores del radicalismo, con Pullaro presente pero sin Losada que estaba con agenda nacional, todos los del PRO, aunque sin Fedrico Angelini presente, cada espacio del socialismo, sin Clara García en el lugar, y el partido CREO encabezado por Javkin, le dieron el marco a la foto de lanzamiento en pleno verano.

El PRO quiere que se parezca lo más posible a Juntos por el Cambio, ya que sus dirigentes tienen que rendir cuentas en el partido y necesitan mostrar que lo que se está gestando va a ser para acompañar las candidaturas nacionales que vayan nuevamente por el poder nacional. Cambia Santa Fe y Juntos por Santa Fe son las propuestas, y el segundo cierra mucho más que el primero. La palabra “cambia” está muy identificada con el macrismo, que lleva más de 8 años militando con ese concepto, y al socialismo, el otro extremo del armado, no le apetece mucho.

Parece una pavada, pero no lo es. Cómo se va a mencionar al nuevo grupo político puede dividir las aguas y generar un impacto. Es una prueba piloto para las negociaciones venideras y el escenario propicio para que fluyan los diálogos a modo de ensayo. Pero, además, es un elemento que tendrá ganadores y perdedores si no hay unanimidad y puede marcar fortalezas y debilidades internas de cara al armado de las listas.

La primera charla del espacio opositor conformado, amenizada con masas finas y gaseosas.

En ese orden, los ejemplos nacionales son para tener en cuenta. Existe “Cambia Mendoza”, con el radical Rodolfo Suárez a la cabeza, “Cambia Jujuy”, con el correligionario Gerardo Morales manejando los hilos, “Vamos Juntos”, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y Encuentro por Corrientes (ECO), una coalición de muchos partidos liderada por el gobernador Gustavo Valdés. Ninguno de estos cerrará en nuestro territorio, y habrá que agilizar el ingenio para poder darle nombre a este hijo por nacer.

A partir de este eje, se vendrá un segundo debate: si es un frente nacionalizado o se reduce al territorio santafesino. En ese tire y afloje de la soga, quienes estarán en los extremos serán nuevamente el PRO y el socialismo, mientras que el radicalismo será el árbitro que regule el evento. “Somos la Cenicienta del frente de frentes, vamos respondiendo a las inquietudes y sabemos que se puede conseguir consensos a pesar de las disidencias”, le dijo un dirigente de la UCR a RedBoing.

A la tarde en Villa Banana, a la noche en San Genaro. Javkin y Losada pasaron el día juntos.

En medio de estas discusiones, se vieron las caras en San Genaro distintos dirigentes de fuste de la oposición. Se sacaron una foto juntos de camaradería Pablo Javkin y Carolina Losada, ambos con sus equipos de trabajo. En otro rincón del evento estaban presentes Maximiliano Pullaro y Gabriel Chumpitaz, una alianza entre un UCR y un PRO más que consolidada después de la contienda del 2021 en donde compartieron lista.

El PJ, a otro ritmo

En este contexto del barco opositor, el peronismo sigue sin levantar cabeza. Naufraga en un armado que se posterga por las urgencias de la gestión, y busca empezar a enderezar la nave hacia el 2023. El gobernador Perotti y su equipo están por resolver el calendario electoral, y con eso llegará la primera reunión del partido de este año. Va a ser difícil que haya acuerdos macro que vuelvan a poner a un Frente de Todos sobre la mesa, y ya piensan en alternativas de nombres y de alianzas internas.

Atrasado respecto de la agenda del frente de frentes, el peronismo no se desespera porque aún ostenta el poder en la provincia y en la Nación. Con el gobernador seguro de los pasos que va dando y poniendo en duda la continuidad de la unidad, el Movimiento Evita buscó aliados en Rosario para apuntalar la candidatura a gobernador de Eduardo Toniolli. Ciudad Futura tiene un acuerdo con ellos y buscarán generar candidaturas a intendente, senador, diputado y gobernador consensuadas entre ambos espacios.

Ciudad Futura decidió en asamblea jugar dentro del frente del espacio peronista. Pragmatismo por sobre purismo.

Sin embargo, el grupo con militancia barrial liderado por Juan Monteverde y Caren Tepp tiene decidido presentar lista de concejales por afuera, ya que tienen que renovar 3 bancas en esta competencia. No hay manera de que lo logren en una lista charlada con el Evita, pero lo demás va sobre rieles.

La Cámpora, en ese contexto, tiene charlas y reuniones cotidianas con Marcelo Lewandowski. La belicosidad con la que se ha dirigido el periodista hacia el gobernador, y las truncas negociaciones sobre finales del 2022, hace que se arrime posición con el espacio cristinista en Santa Fe. La duda pasa por el lugar que ocupará en la grilla, si estará compitiendo por gobernar Rosario o la Provincia. Hoy es el que mejor mide en ambas categorías y eso lo posiciona, al menos, para las negociaciones.

El rossismo tiene como objetivo impulsar a Leandro “Kiko” Busatto como uno de los competidores hacia la gobernación. Sin embargo, no ha entablado diálogo con otros espacios y puede haber alguna fusión con el espacio generado entre el Evita y Ciudad Futura. Mientras tanto, el líder del espacio sigue generando relaciones en Buenos Aires desde la titularidad de la AFI y la cercanía con el presidente Alberto Fernández. De esta tribu, el que tiene decidido que va a competir nuevamente por la intendencia de Rosario es Roberto Sukerman, uno de los principales impulsores del ingreso del grupo de Monteverde al campamento peronista.

El armado electoral se va acomodando, aunque la postergación dilató los tiempos de todos los espacios políticos. La falta de caudillos hace que la democratización de los armados sume riqueza a la hora de ceder ante los posibles aliados. Febrero y marzo serán los meses de las consolidaciones antes de empezar con la cartelería en vía pública y las publicidades en Instagram y Youtube.

Comentarios