El gobierno nacional acumula una deuda de $500 millones en certificados de obra correspondientes a las plantas potabilizadoras de Granadero Baigorria y Santa Fe.
La deuda surge tras la disolución del Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (ENOHSA), que gestionaba los recursos de manera autárquica. Desde octubre de 2024, los pagos quedaron a cargo de la Subsecretaría de Recursos Hídricos, que no ha cumplido con las obligaciones asumidas. Las obras presentan un avance del 18% en Santa Fe y 15% en Baigorria, pero el ritmo ha disminuido significativamente.
Pese a los compromisos iniciales, las empresas contratistas aún esperan el pago de los meses adeudados. Mientras tanto, el Estado provincial busca alternativas para garantizar la continuidad de estas obras esenciales para la región.
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