Juan Carlos Donatti es un comerciante intermediario de huevos. Desde hace 35 años junto a su familia se dedican a abastecer de ese producto a pequeños comercios como granjas, despensas o sandwicherías. Sin embargo, se encuentra en un momento crítico.
Los distintos aumentos han golpeado de lleno su rubro y semana a semana recibe los cajones de huevos con aumentos que alcanzan los $500. En diálogo con Gabriel Pennise, explicó que durante “la pandemia subió el consumo, el precio venía planchado, y por eso el cajón tuvo un incremento de casi 2000 pesos”.
“A partir de hace 6 semanas empezó a subir todos los lunes de 500 pesos. Las explicaciones son varias: falta de mercadería, monedas extranjeras más fuertes, etc. Considero que el consumo de huevos en el mercado interno es más o menos el mismo”, atendió el comerciante.
En la misma línea, dijo en Antes de Todo que, como en todos los rubros, los primeros aumentos fueron entendibles. Sin embargo, hizo foco en la diferencia de lo pagado en dos compras que se distancian en solo un mes y medio: “El seis de junio pagué cuatro mil pesos el cajón y el 25 de julio seis mil seiscientos pesos. Gano lo suficiente como para recomprar la mercadería, y a veces ni eso”.
“Me están comiendo los aumentos, no hay un parámetro”, concluyó.
Comentarios