Una mujer de Afganistán tuvo que vender a su hijo de un año y medio por 30.000 afganis, aproximadamente unos 32 mil pesos argentinos para costar la atención médica de su hija de 13 aos de edad.
La madre, identificada como Lailuma, es procedente de la provincia de Baghlan y ahora vive en un campamento de desplazados de Kabul. Por su parte, su marido se encuentra desaparecido desde el año pasado. En los últimos meses, medio millón de personas se vieron despalzadas en ese país.
“No tenía más remedio que vender a mi hijo. Nadie quiere hacer algo así”, lamentó Lailuma, una de centenares de personas que viven sus vidas en los campamentos de Kabul.
Por su parte, otra mujer, llamada Maria, conoció el caso de Lailuma y avisó de que no será la única mujer obligada a tomar esta misma decisión. “Nuestros hijos están enfermos, no podemos dormir por la noche”, manifestó.
“Vinieron aquí y nos hicieron unas encuestas, pero hasta ahora no nos han dado ayuda alguna. Nos vamos a morir de hambre si esto sigue así”, lamentó otra desplazada, de nombre Aaisha.
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