San Rafael es un caos por estos días desde que se conoció que la Justicia investiga a la plataforma Ganancias Deportivas por estafas bajo el conocido esquema Ponzi, piramidal o mandala de la abundancia. Es que en el Sur provincial es un secreto a voces que hay una gran cantidad de personas involucradas en el tema, incluso algunos con importantes cargos.
Ganancias Deportivas se presenta como una web de “mercadeo en red”. Para poder ingresar hay que comprar un paquete de suscripción de 106 euros, a partir de allí se consigue el derecho de “invertir” pero este depósito no se puede retirar antes de los seis meses y ofrece ganancias del 20%. Para incrementar este porcentaje se incentiva a crear redes sumando a más personas.
De dónde sale el dinero es el punto determinante para establecer si se trata de una estafa. Según la empresa, creada por un costarricense y dos españoles, el capital es utilizado para realizar apuestas en el fútbol pero se jactan de contar con un equipo de expertos analistas que incrementan las posibilidades de apostar al ganador. “Estamos teniendo un rendimiento de 7 de 10, podríamos ingresar al récord Guinness”, aseguran quienes intentan captar a más personas.
A pesar de la explicación oficial, son varios los puntos que los unen al sistema ideado por el inmigrante italiano Carlo Ponzi en 1920 que terminó con decenas de personas en la miseria en Boston. También conocido como estafa piramidal o mandala de la abundancia, se trata simplemente de pasar el dinero de mano en mano. Esto rinde sus frutos mientras la red se amplía ya que los nuevos apalancan las ganancias de los de arriba. Pero cuando ya no hay más interesados o los más antiguos deciden no reinvertir, el esquema se rompe.
Cabe preguntarse por qué la ilegalidad de esto y es que el dinero no sale de ningún lado, es decir, no existen las supuestas ganancias sino que algunos se enriquecen a costa de muchos que sirven como cimientos y, muy probablemente, estos últimos se quedarán sin nada cuando todo colapse.
Quienes participan de la investigación miran con espanto lo que ocurre debido ya que, según aseguran, la mayoría de los que participan saben se que se trata de una estafa pero especulan con que la red no se rompa antes de que se cumpla el plazo de seis meses para que puedan retirar su dinero. “Es moralmente reprochable. Es lo más salvaje del individualismo”, comentan.
El éxito que ha tenido este sistema en San Rafael es tal que en pleno centro se han alquilado locales en donde se ofrece la suscripción. “Hay mucha gente involucrada, algunos ni siquiera lo admiten. Pero sabemos de personas que han vendido vehículos o usado las indemnizaciones de su trabajo para ponerlas en esta plataforma”, indican fuentes allegadas a la investigación.
David Villegas es quien asegura haber comenzado en ese departamento con esta red y se jacta de tener más de 40 mil personas en su equipo. “Un amigo de Italia me contó, hablé con los dueños y me explicaron cómo funcionaba”, indica en los videos donde promociona las “importantes ganancias” que ha obtenido.
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