Las clases comenzaron la semana pasada con distintos protocolos aprobados por el Ministerio de Salud y Educación de la Provincia: barbijos obligatorios, medición de la temperatura previo al ingreso a las aulas, ingresos escalonados, módulos de 90 minutos y recreos de 30. Sin embargo, científicos del CONICET, en referencia a este último punto, presentaron una posible modificación para prevenir aún más los contagios de Coronavirus.
Pablo Emiliano Tomatis, doctor en ciencias biológicas, investigador de CONICET, docente de la UNR e integrante del grupo @CienciaRosarina, hablo este jueves en el programa “Antes de Todo” de radio Boing, que conduce Gabriel Penisse y explicó los fundamentos del proyecto: “Hasta ahora todo el énfasis se ha puesto en evitar contagios que vienen por superficie y ya hace tiempo que la comunidad científica demostró que los contagios vienen por vía aérea”. Y recalcó: “Hay que cambiar el enfoque de los cuidados que se está teniendo, uno de los aspectos es que estén en lugares bien ventilados. Por ejemplo un aula que tenga las puertas abiertas, las ventanas, nosotros necesitamos remover el aire que está en el aula por aire nuevo. Se complica más si le pedimos a los alumnos que estén mucho tiempo cursando en un lugar cerrado”.
Tomatis remarcó el objetivo principal de su grupo de investigadores: “Nosotros pedimos que se consideren los conocimientos que hemos adquirido en estos tiempos y que cambien los tiempos de permanencia en el aula. Pedimos módulos de 45 minutos y recreos de 10”.
El doctor en ciencias biológicas explicó se refirió a cómo fue la recepción de la presentación las autoridades universitarias: “Hemos tenido buena recepción por parte de la UNR que se hizo eco de nuestra movida”. Y agregó que “el protocolo vigente es esto de tener 90 minutos de clase, 30 de recreo y después otros 90”. “El recreo largo es porque en ese momento hay que limpiar las aulas y justamente lo que queremos hacer énfasis es que en la limpieza no está el problema, el contagio no viene por la superficie, viene por el aire”, indicó Tomatis.
El docente universitario explicó cuales son las cuestiones que deberían tenerse más en cuenta:“Hay que cambiar el objetivo de nuestros cuidados. Está demostrado que más del 80 % de los contagios se dan por la vida aérea. Como todo va por esa vía todo sale por nuestra boca y nuestra nariz, por eso es fundamental el uso de un buen barbijo. Segundo el distanciamiento porque cuanto más cerca este una persona de la otra más riesgo se corre de que estas gotas lleguen y tercero la ventilación, hay escuelas que propusieron actividades al aire libre lo cual nos parece excelente”.
Tomatis, para finalizar, brindó más argumentos: “La vía de contagio principal es por el aire y si el aire no está bien ventilado, no se renueva, las gotitas se van acumulando. Lo mejor es estar el menor tiempo posible en lugares cerrados. Acá hablamos de las escuelas, pero esto aplica para cualquier espacio cerrado. No hace falta que estén las ventanas abiertas de par en par. Uno puede medir la cantidad de dióxido de carbono que hay en un lugar cerrado y eso nos da la pauta de si el lugar está bien o mal ventilado. Hemos hecho medidas en algunas escuelas”.
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