Se trata de un joven de 22 años al cual se le atribuye haber efectuado una serie de balaceras en octubre de 2020 bajo órdenes recibidas desde la cárcel de Piñero. Estos se dieron contra una contra una dependencia del Servicio Penitenciario en Alsina y Pellegrini, y la otra contra una casa en la que supuestamente vivía alguien a quien tenían que asesinar por encargo.
El delincuente ya se encontraba detenido desde aquel entonces, sin embargo, por medio de las pericias realizadas a su teléfono celular se pudo determinar que fue quien llevó a cabo las balaceras. La primera de ellas, contra la dependencia estatal, tuvo como saldo 6 disparos contra la fachada. En tanto, la segunda se dio contra una vivienda de Cochabamba al 6000 donde hace algún tiempo residieron colombianos que habían estado implicados en una serie de entraderas.
Según se desprendió de la investigación a cargo de la fiscal Valeria Haurigot, el mismo joven se haría cargo de los ataques en conversaciones de Whatsapp. En ellas, dialoga con una persona apodada “Enano” que se encuentra presa en Piñero y quien sería el autor intelectual de las balaceras.
La funcionaria solicitó que continúe detenido preventivamente, ya que al ser detenido junto a dos jóvenes más mientras estaban a bordo de un automóvil robado, portaban un arma de fuego cargada a metros de la cárcel de Piñero. Entre los mensajes recibidos por el delincuente, dieron con uno que hablaba de “dar de baja” por “200 palos” a uno que “sale el 16 de estar preso”.
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