Hezbollah bombardeó este jueves con cohetes a Israel y dejó un saldo de cinco fallecidos y un herido de gravedad. El ataque se produjo en la zona agrícola de Metula, a solo 150 metros de la frontera con Líbano. Es la ofensiva más letal del grupo terrorista sobre el pueblo judío hasta el momento.
“Hay cinco muertos, un granjero y cuatro trabajadores agrícolas extranjeros“, manifestó David Azulai, presidente del Consejo Regional. Los disparos los realizaron desde Líbano y cayeron en el norte de Israel, en una localidad mayormente rural.
De las cinco personas fallecidas, cuatro eran extranjeras mientras que solo una era israelí. Las autoridades ya comenzaron una investigación para saber cómo sucedió y reforzaron las medidas de seguridad. Además instaron a la población a mantenerse alerta.
El miércoles el grupo chií confirmó que logró superar el sistema de defensa antiaéreo israelí luego de lanzar cohetes y drones a Hadera, Haifa y Acre. El país comandado por Benjamin Netanyahu respondió con ofensivas a Baalbek y Nabatiye.
El mismo día, Israel había difundido la creación de una unidad para controlar específicamente las zonas limítrofes: “El ministro de Defensa, Yoav Gallant, y el jefe del Estado Mayor, el general Herzi Halevy, acordaron establecer una División Regional Oriental destinada a proteger las fronteras orientales del Estado de Israel”.
Este mismo jueves el país asiático había logrado abatir a Muhammad Jalil Alian, comandante de la unidad de misiles antitanque de Hezbollah. La operación fue llevada a cabo por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en Qalaouiyeh, una ciudad ubicada a 11 kilómetros de la frontera con Líbano.
También logró por la vía de combate aéreo bombardear centros de “inteligencia, almacenes de municiones, cuarteles generales utilizados y la unidad de armamento” que la organización terrorista poseía en Al-Qusayr, Siria.
Comentarios