El quinto y último álbum de estudio de Gustavo Cerati en su etapa como solista, se lanzó el primero de septiembre de 2009, cumpliendo este miércoles 12 años. Caracterizado por un sonido folk con presencia de guitarras acústicas y mandolinas, con sonidos más suaves y melódicos.
En la Argentina, el artista consiguió el disco de oro tras vender más de 20.000 unidades en su primera semana. Luego alcanzó el disco de platino. El ex líder de Soda Stereo supo decir en una entrevista al diario Clarín respecto a su obra: “La concebí y la pensé como álbum. Por eso también va a haber una edición en vinilo. Es muy loco: en los ’80 añoraba los discos simples de los años dorados del rock; ahora que volvió el single -en otro formato- no me interesan más, me interesa la cosa más completa. Es además un disco de viaje, de carretera. Más solitario que Ahí vamos, más celebratorio y asimismo con una alta dosis de alarma ante los fenómenos naturales”.
“Se iba a llamar Viento, al final quedó Fuerza natural. No tiene un mensaje ecológico, pero habla justamente de las fuerzas naturales internas y externas, las invisibles y las cotidianas. También tiene mucho campo, mucha pampa. Gran parte de la lírica la escribí en una chacra que tengo en José Ignacio, Uruguay. Es como un compendio de mi carrera, pero expansivo; no es una suma de clichés, pero están”, añadió. El primer corte de difusión fue Déjà Vu
Este fue el último trabajo de Gustavo Cerati previo al accidente cerebrovascular sufrido el 15 de mayo de 2010 en Venezuela, tras tocar el último recital de la gira que llevaba el mismo nombre de su disco.
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