Este miércoles, el Gobierno de Estados Unidos suspendió las visas del expresidente ecuatoriano Rafael Correa y su vice, Jorge Glas, quienes no podrán ingresar al territorio norteamericano debido a su participación en actos de corrupción durante su gestión pública.
La medida anunciada por el Departamento de Estado de ese país alcanzó a las esposas e hijos de quienes gobernaron en Ecuador entre 2007 y 2017.
“Correa y Glas abusaron de sus cargos como exmandatario y exvicepresidente de Ecuador, respectivamente, al aceptar sobornos, incluso a través de contribuciones políticas, a cambio de otorgar contratos del Gobierno”, expresó en un comunicado el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
El comunicado amplió que el objeto de esta medida recae en la necesidad de “incrementar la transparencia gubernamental y exigir cuentas a los funcionarios públicos corruptos”.
En respuesta, el expresidente ecuatoriano se manifestó en sus redes sociales. “La maldad humana. Obvian que nadie en el mundo ha aceptado la sentencia por ‘influjo psíquico’ y que cinco países han dado asilo político a los involucrados en el ‘Caso Sobornos’. Meten hasta a mi familia ¡No hay derecho!”, señaló.
Una de las decisiones que enemistó a Correa con Estados Unidos recayó en la apertura de la embajada ecuatoriana en Londres para recibir al fundador de Wikileaks Julian Assange, quien aún era un hombre buscado por las autoridades estadounidenses.
Correa fue declarado culpable en ausencia por cargos de corrupción en Ecuador en 2020 y fue sentenciado a ocho años en prisión, por lo que debió exiliarse en Bélgica desde 2017.
“El Departamento también designa a la esposa de Correa, Anne Malherbe Gosselin, y a sus hijos mayores de edad, Sofía Correa, Anne Dominique Correa, y Rafael Miguel Correa, como inelegibles para entrar a los Estados Unidos. Además, el Departamento también designa a la esposa de Glas, Cinthia Díaz Aveiga, y a su hijo mayor de edad Jorge Glas Díaz como inelegibles para entrar a los Estados Unidos”, insistió Miller.
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