Un informe de la Unidad Regional II (URII) señala que durante octubre se incautaron en el Departamento Rosario más de diez armas por día en diversos operativos policiales. En total, entre las que se detectaron en flagrancia o persecuciones, más las que se obtuvieron de chequeos en controles de rutina, fueron 330 las pistolas, revólveres, escopetas y carabinas que se sacaron de la calle. A mediados de mes pasado el ministro de Seguridad, Claudio Brilloni, había dicho sobre este tema: “Las armas incautadas van al Centro de Justicia Penal, a un depósito judicial. Y luego de que se cierran las causas penales por las que fueron encontradas, son destruidas”. En aquella oportunidad, el funcionario provincial fue muy crítico con el funcionamiento de la Agencia Nacional de Materiales Controlados (ANMAC) que es la que debe realizar los controles.
Brilloni había señalado también que entre los barrios de Rosario en los que se encuentran armas con más asiduidad están Empalme, Larrea, Industrial y Las Flores, entre otros. “Nosotros consideramos que las armas provienen del mercado interno, que son de civiles que tienen legítimo usuario que las ceden o las alquilan a las bandas, también hemos visto algún caso de funcionario policial al que se la roban, aunque eso no es algo que pase con frecuencia”, planteó el funcionario.
El trabajo de la UR II sobre lo incautado en octubre detalla también que se encontraron 134 revólveres y 128 pistolas, además de 29 escopetas, 16 carabinas, 7 de fabricación casera, 3 pistolones y un fusil de guerra. Así, el 80 por ciento de las armas fueron cortas. En cuanto a la forma en la que fueron obtenidas por la policía, 121 del total fueron durante chequeos en controles y otras 109 en flagrancia. Al número de lo que se retiró de la calle por operativos de prevención policial, debe sumarse el de los allanamientos que ordenan la justicia provincial y la federal.
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