En medio de la fuerte crisis que atraviesa la relación de Barby Franco y Fernando Burlando, la modelo decidió responder a las preguntas de sus seguidores en Instagram, donde aseguró que tomó una decisión muy importante para el futuro del vínculo con el letrado.
Es que hace tres años, Burlando y Franco decidieron que la columnista de espectáculos se coloque un chip de geolocalización en el cuerpo después de haber sufrido varios robos en su casa y un intento de secuestro.
Por eso, sin esquivar a ninguna consulta de sus seguidores de Instagram, una de las primeras preguntas que le hicieron fue sobre este famoso método de geolocalización que se implantó tiempo atrás.
Según se supo, hay 10.000 chips de geolocalización activos en el mundo que son colocados por un empresa de Israel. Estos dispositivos, tiene que contar con una batería ya que no son detectados como metales y tampoco suelen aparecer en radiografías.
Respecto a la profunda crisis que tratan de reparar desde hace meses, Franco reconoció que tomaron la decisión de continuar el confinamiento separados por lo que “desde noviembre” intentan “vivir alejados”, pero aseguró que eso: “no funcionaba”.
Pese al desgaste de la relación, la modelo aseguró que terminaron en buenos términos y que están haciendo todo lo posible para recomponer la situación.
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