Durante la mañana del viernes, trabajadores del Sanatorio Plaza iniciaron un paro de actividades tras tres meses consecutivos de retrasos en el pago de sus salarios. La medida, liderada por la Asociación Trabajadores de la Sanidad (ATSA), busca visibilizar la crítica situación que afecta a 300 empleados, quienes solo recibieron un 35% de sus sueldos este mes, sin certezas de cuándo se abonará el resto.
Adrián Casagrande, referente de ATSA, brindó detalles sobre la sitaución: “Este mes es el más crudo de todos. Le dieron solamente el 35% de los ingresos y dicen que el 20% restante llegará recién el 20, teóricamente, pero no hay ninguna garantía”. Los trabajadores decidieron realizar una “retención de mano de obra”, es decir, un paro con presencia en los lugares de trabajo, aunque sin abandonar la atención a los pacientes más vulnerables.
El conflicto abarca a todo el personal del sanatorio, incluyendo a supervisores. “Es la única institución en Rosario que está haciendo esta parcialización de salario de una manera abrupta”, remarcó Casagrande. Expresó, además, que muchos empleados enfrentan serias dificultades económicas: “Hay compañeros que han cobrado 180 mil pesos y hoy como está la situación no alcanzan a pagar ni alquiler ni nada”.
La medida de fuerza se lleva a cabo mientras se desarrollan negociaciones en el Ministerio de Trabajo de la provincia, donde directivos del sanatorio y representantes de ATSA intentan llegar a un acuerdo. Sin embargo, el gremio denuncia la falta de comunicación clara por parte de la empresa. “Nadie de la empresa bajó y nos dio la cara. Solo pegaron un cartel en el reloj de marcación diciendo que van a pagar el resto del salario el 20”, criticó Casagrande.
Pese al descontento, los trabajadores insisten en que el paro se realiza de manera pacífica y conforme a la normativa vigente. “No queremos conflictos. La idea es hacer una retención tranquila, pero lo que más queremos es que esto se solucione”, aseguró el representante gremial.
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