En el marco de un trabajo de articulación entre la Municipalidad y la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Rosario, a través del equipo del programa Soporte Vital, durante 2024 se realizaron capacitaciones sobre Reanimación Cardiopulmonar (RCP) en escuelas y espacios públicos del distrito Centro, destinados especialmente estudiantes y docentes, aunque algunos abiertos al público en general. Se trata de una iniciativa que busca promover herramientas a la ciudadanía para saber cómo actuar en situaciones de emergencias y de tal manera poder salvar vidas.
La Reanimación Cardiopulmonar es una técnica de primeros auxilios que puede marcar la diferencia salvándole la vida a personas en situaciones de emergencia. Los conocimientos que se comparten en estos encuentros, por los que pasaron más de 1.000 personas a lo largo del año y los cuales están mayormente vinculados a impartir nociones prácticas y operativas, buscan transmitir a la ciudadanía que, ante una situación de emergencia, su accionar puede salvar vidas.
Acerca de la importancia de la RCP, el director del programa Soporte Vital, Roldofo Leiva, señaló que “una de cada cinco muertes en adultos en países desarrollados se debe a causas cardiovasculares”, y amplió: “La mitad de esas muertes se produce de forma súbita y un gran porcentaje en el ámbito extrahospitalario”.
En este marco, consideró: “Una estrategia para abordar esa problemática es la educación y el desarrollo de programas de salud pública que permitan capacitar a la población general en la realización de RCP y el correcto uso de los desfibriladores semiautomáticos externos, que se encuentran disponibles en espacios públicos de circulación masiva”.
“Las maniobras son simples y capacitarse requiere un breve tiempo. Contar con ciudadanos capaces y comprometidos con la vida resulta de vital importancia. Más aún en el marco de un proyecto de construir ciudades cardioprotegidas”, añadió Leiva.
La experiencia en escuelas y espacios públicos
Desde la Municipalidad se consideró imprescindible convocar a instituciones educativas, con el objetivo de que los docentes y estudiantes puedan brindar apoyo en caso de tener que enfrentarse a este tipo de situaciones críticas. En tal sentido, durante 2024 y en articulación con el equipo de Soporte Vital, se realizaron capacitaciones en las escuelas Bernardino Rivadavia, Los Arrayanes, Latinoamérica, Servando Bayo, así como también los EEMPAS José Hernández y N° 1317, entre otras.
Asimismo, hubo encuentros en espacios públicos abiertos a la comunidad: cruce de peatonales, plaza Libertad, el Mercado del Patio y la plaza López fueron algunos de los escenarios para estas jornadas.
En relación a estas experiencias, Analía Tosto, directora de la Escuela N° 1267 Latinoamérica, comentó: “Nosotros, que tenemos comedor escolar, tenemos miedo de presenciar una urgencia de este tipo y no saber aplicar las herramientas necesarias para salvaguardar la vida de una persona. Por eso recibimos esta capacitación como una experiencia hermosa y supervalorable’’.
En espacios laborales o educativos, es muy beneficioso contar con gente capacitada ya que es una forma de intervenir rápidamente en situaciones de emergencia. Generar el acceso a cursos de este tipo genera solidaridad y responsabilidad entre ciudadanos. Aprender sobre técnicas manuales que ayuden a salvar vidas es una forma de construir lazos colectivos de confianza.
Al respecto, la directora del Centro Municipal Distrito Centro, Roxana Gazanea, sostuvo: “Es sumamente valioso el trabajo articulado con las diferentes instituciones para poder lograr estas capacitaciones. En este tipo de actividades participan estudiantes, docentes, vecinos, alumnos y personal municipal con lo cual logramos un circuito virtuoso en algo tan importante como es el estar preparado para dar las primeras respuestas ante situaciones críticas”.
“Apuntamos a que quienes participan puedan tomar conciencia que esa primera respuesta puede salvarle la vida a otra persona. Por ello estamos muy agradecidos con las instituciones con las que trabajamos como así también con los vecinos y vecinas que formaron parte ya que en todos estos meses se pudieron capacitar más de 1.000 personas”, remarcó la funcionaria.
Cómo actuar ante una persona sin signos vitales
Lo primero que debe hacerse es evaluar la seguridad de la escena, garantizando que no haya peligros como tráfico, electricidad o fuego. Luego se debe verificar si la víctima responde, y en caso contrario, comprobar los signos vitales. Si no respira normalmente o no se encuentra pulso, se debe activar el sistema de emergencias llamando al 107 o pidiendo a alguien que lo haga, siendo bien claro y directo en esta orden, sobre todo si se trata de un lugar muy concurrido.
Una vez activado el sistema de emergencia, se debe comenzar con las maniobras de RCP, continuando con las mismas hasta que llegue la asistencia médica o la víctima comience a respirar normalmente. Justamente en estos cursos, se brinda la posibilidad de realizar prácticas con maniquíes de reanimación, bebés muñecos y también se enseña el uso de desfibriladores.
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