Argentina logró un nuevo desembolso de parte del FMI de 5.200 millones de dólares para el corriente mes y una modificación en la meta de reservas para el Banco Central dispuesta para 2023 por la sequía del campo.
El ministro de Economía de la Nación, Sergio Massa, viajó a Bengaluru (India) para reunirse con Kristalina Georgieva. Allí mantuvo dos reuniones en las que explicó que la falta de lluvia provocó una reducción sumamente considerable para la producción en el agro. Además se acordó el desembolso de 5.200 millones de dólares como consecuencia del cumplimiento de las metas acordadas con el FMI para el último trimestre de 2022.
El nuevo trato sería anunciado en las próximas horas en Washington. Previo a esto, Argentina se había comprometido a incorporar 5.500 millones de dólares durante el primer trimestre de este año. Una cifra inalcanzable como consecuencia de la sequía y el conflicto en Europa.
Por otro lado, Massa entregó a la directora del FMI un paper del Palacio de Hacienda que describe con exactitud el impacto de la guerra en Ucrania respecto a la disposición extraordinaria de divisas que tuvo que ejecutar la Argentina.
“La guerra en Ucrania ocasionó importantes cambios en el escenario económico mundial, que generó un efecto negativo de US$ 4.940 millones en la balanza comercial que se atribuye a un shock general de precios internacionales del sector agropecuario (soja 9,4%, trigo 33,7% y maíz 17,8%) y sobre el precio de los combustibles (Gas de Bolivia 114%, GNL 233% y Gasoil 85%)”, revela el informe sobre el costo de la guerra que preparó la cartera de Economía.
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