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Opinión

El debate, los escándalos y los gabinetes

En la previa del primer debate presidencial, los ruidos en la provincia de Buenos Aires por el caso Insaurralde y las declaraciones del presunto secretario de Educación de Milei, sumado a su lejanía del ámbito público, calentaron los motores en la recta final de la campaña. En silencio y por lo bajo, en Santa Fe y en Rosario continúan las negociaciones por los gabinetes, afectadas en algunos casos al resultado nacional del 22 de octubre. Pullaro y Javkin definen.

El caso Insaurralde hizo ventilar las internas que ya existían en el peronismo bonaerense. Máximo Kirchner lo quería a él como vice gobernador, mientras que Áxel Kicillof puso como condición sine qua non que sea Verónica Magario. Ganó el jefe de Estado de Buenos Aires esa puja, pero profundizó una crisis en la relación entre ambos, que tuvo su correlato en el armado de las listas. Ahora, con las historias de Sofía Clerici disfrutando junto a él en Marbella en un yate, ostentando regalos de relojes Rolex y carteras Louis Vuitton, se desató un escándalo que terminó con la renuncia ya aceptada a su cargo de jefe de Gabinete del gobierno provincial.

A pocas horas del debate que tiene como uno de los protagonistas a Sergio Massa, el peronismo se ve inmerso en esta polémica que tuvo su escalada en redes sociales y manifestaciones varias de periodistas y dirigentes políticos haciendo hincapié en la obscenidad con la que se manejó el ex intendente de Lomas de Zamora en medio de una crisis económica profunda que atraviesa el país gobernado por el peronismo y la campaña presidencial y del gobernador Kicillof. Cortaron por lo sano, pero el impacto se verá recién en las urnas del 22 de octubre, ya que Buenos Aires tiene boleta sábana unida con las presidenciales.

Milei, en esta nueva grieta, en construcción aún, entre el oficialismo y el libertario, se borró de los medios y de las recorridas en la última semana, lo que generó un sinfín de especulaciones detrás de su desaparición del ámbito público. Hasta se mencionó en reiteradas ocasiones que padecía algunas complicaciones vinculadas al estrés que acarrea cualquier campaña, con derivaciones en atención de profesionales. Fueron desmentidas estas versiones por él mismo en las redes sociales, aunque no fueron contundentes los argumentos del porqué de su lejanía.

Martín Krause, el hipotético secretario de Educación de Milei, un docente histórico, libertario, hizo una afirmación desafortunada que derivó en múltiples repudios por parte de la comunidad judía y la política en general. Milei salió a respaldarlo, reconociendo que fue un error lo que dijo, y aseguró que cualquiera puede equivocarse. Lo cierto es que afirmar que los judíos tuvieron mala suerte de que la Gestapo fuera alemana y no argentina, ya que si era de acá hubiesen muerto muchos menos por la corrupción y la ineficiencia, es una declaración desacertada y desagradable en medio de una campaña tensa contra su propio candidato.

Bullrich llega al debate con tres victorias resonantes en la previa -Santa Fe, Chaco y Mendoza-, y con la energía renovada por haber instalado algo de la agenda con Melconián y su equipo. Se gestó una caravana por el país de ella visitando el territorio, algo similar al plan de Macri en 2019 después de perder feo la PASO, y eso le puede traer sus réditos en las urnas. Sigue tercera en las encuestas que se publican, pero su grupo confía en que en el sprint final muchos votos racionales van a volcarse a la ex ministra de Seguridad.

Massa logró instalar su propia agenda mediática en base a medidas económicas y políticas por la crisis que generó la inflación y la disparada del dólar. Hace 1 mes que se habla de lo que dijo, lo que hizo o lo que decidió enviar al Congreso el ministro y candidato de Unión por la Patria, desinflando el globo que había gestado Milei antes de las primarias de agosto. La estrategia del peronismo sigue siendo rivalizar con el libertario para poder llegar con él a un balotaje que, según mediciones, sería la única chance que tiene el oficialismo de dar la sorpresa. Suena extemporáneo pensar que con 150 puntos de inflación interanual, el dólar a 800 y el salario demolido, el ministro de Economía pueda vencer en las elecciones, pero en Argentina 2 más 2 nunca es 4.

En Santa Fe y en Rosario, mientras avanzan las campañas nacionales, la transición en el gobierno provincial y el nuevo gabinete en el municipal es el diálogo político vigente. Pullaro ya eligió a los 7 nombres de su círculo más duro para que lo acompañen en el próximo gobierno, y ofrece 3 ministerios a sus principales aliados del PRO y el socialismo para incluirlos en su gestión con cargos importantes. Trabajo para el macrismo, y Salud y Cultura para el partido de la rosa es la negociación que sigue vigente.

pullaro javkin
Pullaro y Javkin definen sus equipos de gobierno. Foto: Farid Dumat Kelzi.

El PRO pide más, pero sabe que vale en relación a las posibilidades de Bullrich. Hoy la oferta arriba de la mesa para el macrismo es de Trabajo y el nombre elegido por Scaglia, la vice electa con quien Pullaro mantiene el diálogo por los cargos para su partido, es el de Coco Báscolo. Sin mucha preparación en la materia, buscan formarlo contrarreloj e insisten con que debe ser él quien se siente en la silla de la cartera.

Mientras tanto, se corrió el rumor -y nadie lo desmiente- de que segundo en el área estaría Julio Genesini, quien fuera 8 años minstro del Frente Progresista y que es un militante y referente del radicalismo NEO Evolución. El mismo Báscolo se autodefine como “pullarista”, y por eso el resto del partido mira con recelo que sea él quien encabece la representación del macrismo en el gobierno, ya que no se sienten contenidos después del aporte clave que tuvo el PRO para conformar el frente Unidos para Cambiar Santa Fe.

El socialismo propone minar con sus militantes las segundas y terceras líneas del gobierno provincial, con cuadros técnicos que aporten soluciones a las distintas áreas. Sin embargo, el pullarismo ve como generosa la oferta realizada de dos ministerios, sumado a que ostentará la presidencia de Diputados. Si quieren poblar las oficinas de personas propias, el radicalismo pone en tensión el respeto sobre ese acuerdo histórico de que gobierna la Cámara baja quien gana las elecciones. Todo no, al menos por ahora.

En Rosario hubo pocos avances en el gabinete. Sólo está claro que Sebastián Chale va a tener un rol protagónico en la próxima gestión, y que será un gabinete representativo de Unidos y con perfiles altos en lo mediático y jóvenes. Javkin espera que se defina el cuadro nacional y que Pullaro cierre su propio gabinete, en donde él también tendrá representantes con nombres que lo acompañan desde hace décadas, para luego ocupar los casilleros de su futuro gobierno.

Esta noche es el primer cara a cara de los 5 candidatos a presidente. Los debates no cambian votos, sino que convencen a los indecisos y modifica las energías para los pocos días que quedan de campaña hasta las elecciones. Se espera un ataque direccionado a las visiones que aporte Milei, y una crítica fuerte a la situación actual económica que vive la Argentina con el ministro presente como representante del gobierno en las urnas. El modelo kirchnerismo/antikirchnerismo va quedando en el pasado, y estamos atravesando una transición hacia una nueva coyuntura, desconocida por el momento. El cambio de época está en marcha.

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