Alrededor de las 3 de la madrugada, ocurrió un insólito hurto en un bar ubicado en Bv.27 de febrero y Corrientes: se llevaron un toldo.
La dueña del bar comentó que hacia menos de dos meses que había invertido $250.000 en la estructura y lona. Si bien dudó al momento de comprarlo, desde la fabrica le dijeron que era “prácticamente imposible que se lo roben” porque, al ser de gran tamaño, tiene un gran peso.
En las cámaras se puede ver a solo dos personas que van caminando por la calle con el elemento sustraído y, otro sujeto por la vereda. Se estima que hicieron un trayecto de alrededor de 7 cuadras.
Mari, la propietaria del bar, aseguró que sus empleados recorrieron la zona en busca de indicios sobre el paradero del toldo sin éxito. Además, apuntó contra la seguridad: “después de las 10 de la noche no podes estar. No anda nadie, ni la policía”.
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