Una dominatriz «demonio» que mató a puñaladas a su ex en la casa del árbol de su vecino estaba obsesionada con el «juego de sangre» en el dormitorio. Julia Enright trabajaba como flebotomista en un laboratorio clínico y estaba acostumbrada a tomar muestras de sangre, pero su interés pronto se extendió a su vida privada.
Enright, que tenía 21 años en ese momento, se publicitó en tarjetas de presentación como Mistress Jasmine y disfrutó del BDSM en 2018. Creó arte a partir de huesos de animales y mantuvo criaturas, conocidas como “especímenes húmedos y de sangre” en frascos dentro de su casa en Ashburnham, Massachusetts, EE. UU.
Dos años antes, ella había estado estudiando en una escuela secundaria técnica y profesional y conoció a Brandon Chicklis mientras viajaba en un ómnibus. Más tarde comenzaron a salir. Brandon fue asesinado antes de cumplir 21 años.
Brandon, un ex boy scout, era conocido por ser amable y considerado y fue descrito como peculiar, con una risa tonta. Se informó que se encontrarían para tener relaciones sexuales en la casa del árbol de su vecino. Pero para 2018, se habían separado pero seguían siendo amigos.
Luego, el 24 de junio, la familia de Brandon lo denunció como desaparecido. Él les había dicho que estaba visitando a un pariente el día anterior, pero nunca apareció. Una semana después, su auto Honda fue encontrado abandonado en un supermercado.
Después de eso, un runner encontró el cuerpo de Brandon tirado al costado de una carretera en Rindge, New Hampshire, una ciudad al otro lado de la frontera estatal con Massachusetts.
Lo habían apuñalado una docena de veces y sus restos habían sido envueltos en una manta, lona y sábana, y luego metidos en dos bolsas de basura que habían sido selladas con cinta adhesiva. Si bien su cuerpo estaba muy descompuesto, su camisa tenía 12 cortes.
Los investigadores revisaron los registros telefónicos de Brandon y descubrieron que el día que desapareció, se podía rastrear su móvil hasta la dirección de Enright. Ella lo había invitado a visitarla y le había dicho que mantuviera su encuentro en “secreto”.
Cuando la policía fue a su casa, descubrieron cadáveres de animales y un balde con órganos de animales. También había preservativos usados y varios cuchillos. Luego, los oficiales encontraron sangre salpicada en la casa del árbol del vecino, que se confirmó que pertenecía a Brandon.
Los investigadores también encontraron un mensaje que Enright le había enviado a su nuevo novio la noche anterior al asesinato que decía: «¿Crees que podríamos agregar burbujas al baño de sangre?». Momentos después, Enright invitó a Brandon a encontrarse con ella en la casa del árbol al día siguiente, antes de que ella lo apuñalara hasta la muerte.
Después de su muerte, ella sugirió en su diario que había hecho algo por su novio y admitió que un evento la había excitado. Decía: “Era una forma de regalo. Lo hice solo por él. Esa era mi intención”. También había escrito que a su novio podría no haberle gustado su “sorpresa”.
Dos semanas después de que se encontrara el cuerpo de Brandon. Enright fue arrestada y acusada de asesinato en primer grado.
Los fiscales descubrieron que antes de la muerte de Brandon, ella había tratado de sobornar al personal de una clínica de abortos para que le permitieran llevarse un feto a casa. Pero afirmó que no lo habría hecho y que la solicitud era solo parte de su “personalidad escandalosa”.
Su juicio comenzó en noviembre del año pasado. La fiscalía dijo que Enright atrajo a Brandon a la casa del árbol con temática BDSM y lo mató a puñaladas como una sorpresa para su nuevo novio. Antes de que Brandon llegara a la casa del árbol, Enright había cubierto el suelo con la lona y la manta. También había comprado cuerdas y cadenas, que nunca se encontraron.
Mientras estaba en el estrado, Enright dijo que después del asesinato, Lind la había ayudado arrojando el cuerpo de Brandon. Lind fue arrestado y acusado de cómplice después del hecho de asesinato. Se declaró inocente y espera juicio.
Enright fue declarada culpable de asesinato en segundo grado. Fue sentenciada en marzo de este año.
La madre de Brandon, Trisha Edwards-Lamarche, le dijo al juez: «Todos los días, cuando conduzco al trabajo, puedo elegir: ¿Conduzco por donde ella tiró el cuerpo de mi hijo hoy, o conduzco por donde ella tiró su auto?» “Lo que daría por un momento más con mi hijo. Sólo un momento más.
Enright emitió una disculpa en la corte. Ahora con 24 años, le han dado cadena perpetua con la posibilidad de libertad condicional después de 25 años.
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