El pasado sábado, un vuelo con 149 jóvenes que retornaban de su viaje de egresados de Cancún arribó a la Argentina. De ellos, 44 dieron positivo de Coronavirus y encendieron las alarmas de la cartera sanitaria.
Este martes, tocó suelo nacional otro avión con infectados. Como consecuencia, se puso en duda la fiabilidad de los tests realizados en el país por la agencia turística de los estudiantes.
A su vez, se puso el foco en cómo pudieron haberse dado los viajes en medio de una fuerte campaña para desalentar las salidas al exterior En ese sentido, el ministro de Turismo y Deporte, Matías Lammens, confirmó que ambos vuelos se dieron “fuera de regla”.
“Los viajes en sí no necesitaban autorización, cualquier argentino puede salir. Para los viajes de egresados, las agencias tienen que tener una habilitación especial que sí da el Ministerio. Y los pasajes que vendió a Cancún (la agencia) lo hizo fuera de regla”, remarcó el funcionario.
Por su parte, señaló que iniciará un sumario a Moon Travel, la empresa turística encargada de los traslados. De acuerdo a sus declaraciones, no cargaron en el sistema la información correspondiente ni presentaron el comprobante de pago.
Desde México, Hugo López-Gatell Ramírez, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, también responsabilizó a la agencia turística por los tests negativos, puesto que los realizaron en “un laboratorio privado que no tenía autorización técnica para operar”.
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