Ron DeSantis, el gobernador de Florida, decidió ponerle fin al autogobierno reinante en el distrito administrativo por Disney. En castigo a la compañía por oponerse a una ley del estado que prohíbe las clases sobre orientación sexual e identidad de género, el proyecto del mandatario es designar a cinco miembros para supervisar los servicios gubernamentales de los parque temáticos.
Esta legislación acaba con el estatus de autogobierno de Disney y hace que viva bajo las mismas leyes que todos los demás y pague sus deudas y su parte justa de impuestos.
“Hoy el reino corporativo finalmente llega a su fin”, declaró DeSantis. Resulta que el político y la compañía se enemistaron el año pasado cuando Disney criticó una ley que prohíbe enseñar asuntos relacionados con la orientación sexual y la identidad de género en jardines de infantes y en escuelas primarias de Florida sin el consentimiento de los padres.
Comentarios