Luego de la tragedia en Miami, las investigaciones al respecto del hecho se dispararon. Algunos correos electrónicos difundidos últimamente, dejan en evidencia que en 2018 una empresa de ingeniería había comunicado que en el edificio debían hacerse reparaciones que costarían más de 9 millones de dólares.

De ese monto, 3,8 millones deberían haber sido destinados solo al garaje y la piscina para realizar una impermeabilización adecuada, la cual nunca se llevó a cabo.

Además de estos datos, otro documento se publicó por parte de la empresa en el que se expresa que el condominio Champlain Towers, tenía abundantes grietas en las columnas, vigas y paredes del estacionamiento. En el mismo comunicado se dio a conocer que la piscina de la planta baja del edificio descansaba sobre una losa de concreto que tenía daños estructurales importantes y necesitaba una reparación exhaustiva.

Sin embargo, el informe de casi 3 años antes del derrumbe, no advirtió sobre el peligro que estos daños significaban. La investigación continúa y todavía no esta confirmado que alguna de estas fallas haya sido responsable del colapso.