Cuba comenzó esta semana a inmunizar contra el coronavirus a sus adultos mayores, el primer grupo de riesgo identificado por las autoridades. El antídoto que se está utilizando es una de las dos vacunas candidatas desarrolladas enteramente con las capacidades tecnológicas y productivas de la isla caribeña.
“El pinchacito, de momento me dio un ardorcito”, pero “me siento divina”, contó a la agencia de noticias AFP Cecilia Reyes, de 69 años, después de recibir la primera dosis de Abdala. La protagonista fue una de las primeras 70.000 personas inoculadas entre el lunes y martes pasados.
Abdala y Soberana 2 son las dos vacunas que se encuentran ya en su última etapa de investigación. Pero ante la emergencia de una segunda ola el Gobierno decidió comenzar a inmunizar a la franja etaria más vulnerable.
“Nos van a poner dos dosis de Abdala y la tercera es de Soberana 2”, contó a AFP Ana María Cabrera, de 74 años. Tras unos 70.000 vacunados el lunes y martes, el miércoles la campaña inicial de inmunización se extendió a otros cuatro municipios de la capital, administrando tanto la Abdala como la Soberana 2, los dos desarrollos más avanzados de inmunizantes en los que está trabajando la isla.
“Nosotros pensamos que ya en el mes de junio tengamos inmunizadas a 22,6% de la población, en julio 33,5% y en agosto al 70%”, pronosticó el Ministro de Salud José Ángel Portal en una entrevista televisiva.
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