Dani Alves, el exfutbolista brasileño, fue condenado este jueves a cuatro años y medio de cárcel tras ser acusado de haber agredido sexualmente a una joven de 23 años en una discoteca de Barcelona a fines de diciembre de 2022.
El juicio se llevó adelante en esa ciudad y había comenzado dos semanas atrás. El exjugador llegó al proceso oral tras permanecer un año en prisión preventiva. Según lo determinado por las autoridades, una vez que cumpla la reclusión gozará de una libertad “vigilada” por otros cinco años, tampoco podrá acercarse a la víctima, y además, deberá pagar una indemnización de 150.000 euros.
De acuerdo al veredicto, el brasileño fue encontrado culpable del delito de violación cometido el 30 de diciembre de 2022 en la discoteca Sutton de Barcelona. Según La Vanguardia, el tribunal consideró que “ha quedado acreditado que la víctima no consintió y que existen elementos de prueba, además del testimonio de la denunciante, para dar por probada la violación”.
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