Con los anuncios del presidente Alberto Fernández del último viernes, Rosario Central se ilusionó con la posibilidad de albergar público en el Gigante de Arroyito en el choque ante Red Bull Bragantino, sin embargo, no recibieron el visto bueno, pesar de las gestiones de la dirigencia.
En conjunto con River, que debe jugar por Copa Libertadores, solicitaron el regreso de los hinchas, el cual se podría haber dado con la limitación del 30 por ciento del aforo total y bajo estrictos protocolos sanitarios. No obstante, recibieron el pulgar abajo y se les fue comunicado que esto se podría llevar a cabo recién en septiembre.
De esta manera, si el conjunto que conduce Cristian “Kily” González avanza de ronda y llega a las semifinales de la sudamericana, habría grandes chances de tener aforo en el estadio.
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