La familia estadounidense Gracely aprovechó los primeros días de agosto para poder hacer una escapada familiar hacia la zona costera de California, y mientras recorría las playas lugareñas, el hijo más pequeño, hizo un hallazgo que podría revelar nuevos datos sobre una especie extinta hace 22 millones de años atrás.
Durante el viaje, Justin, Janelle y sus hijos Collin y Riley pasaron por Palmetto Fossil Excursions, un lugar que conjuga la educación con la expedición de caza de fósiles en el área de Summerville en California.
En el lugar, el pequeño Riley, de 8 años, caminaba entre los caminos de grava y arena, hasta que se alertó por algo que parecía “el borde de un diente“, y fue como pensó, al sacarlo, encontró un diente fosilizado de 4,75 pulgadas de largo, unos 12 centímetros de un tiburón gigante extinto.
En un posteo del lugar donde se hizo el descubrimiento destacaron: “¡Un diente de Megalodon de 6.2 “descubierto esta tarde por uno de nuestros guías / amigos en el sitio donde estamos extrayendo toda nuestra Capa de Grava Premium! Este monstruo de tiburón habría tenido alrededor de 50 a 55 pies de largo y yo no sé de ti, ¡pero me alegro de que estos dientes sean de un tiburón extinto y no de algo que está nadando en nuestros océanos hoy!“.
Se trata de un diente de la especie Angustidens, un tiburón “familiar” del Megalodón, del cual se conoce que medía cerca de 9 metros de largo, y habría vivido hace unos 33 millones de años.
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