El presidente de los Estados Unidos Joe Biden ordenó a los servicios de inteligencia norteamericanos investigar el origen del coronavirus. Estos tendrán 90 días para redactar un informe en el que tendrán que especificarle al mandatario si la pandemia se generó por medio de un animal, como afirman desde China, o si se filtró de un laboratorio.
En ese sentido, el jefe de la Casa Blanca explicó mediante un comunicado que las agencias deben “redoblar sus esfuerzos para recopilar y analizar la información que podría acercarnos a una conclusión definitiva, e informarme en 90 días”. “Como parte de este informe, he solicitado áreas de investigación adicionales que puedan ser necesarias, incluidas preguntas específicas para China”, agregó en el reporte de prensa.
Por su parte, Biden remarcó que “Estados Unidos también seguirá trabajando con socios de ideas afines en todo el mundo para presionar a China para que participe en una investigación internacional completa, transparente y basada en pruebas y para proporcionar acceso a todos los datos y pruebas relevantes”. Este comunicado significa un cambio de paradigma político de parte de los demócratas, quienes durante el mandato de Donald Trump se mostraron escépticos de la idea de que se hubiera filtrado de un laboratorio.
La OMS realizó una investigación sobre los orígenes de la pandemia, sin embargo, fue altamente criticada por la poca transparencia y colaboración que el régimen chino aportó a sus delegados. Estos habían viajado especialmente a Wuhan para conocer en detalle qué pudo haber pasado durante las últimas semanas de 2019, cuando comenzó la pandemia.
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