Mientras el Plan de Vacunación avanza en la provincia, algunos espacios de poder concentrado, como los gremios estatales, buscan presionar para adelantarse al resto de la población. Puntualmente, para reclamar que deben esperar por no estar dentro del esquema prioritario, los empleados municipales de Santa Fe llevaron a cabo un paro este jueves en “solidaridad” con los locales. Estos, conducidos por Antonio Ratner, dejaron a la ciudad desprovista de servicios clave en medio de la pandemia.
Por ese motivo, hoy solo hubo guardias mínimas en Salud y Control Urbano, y centros de vacunación. Visto de otro modo, los rosarinos se debieron privar de: trabajadores de tránsito, recolección de residuos, trámites en el registro civil, distritos y carnet de conducir; servicios por los que se les cobra impuestos mensualmente.
El Secretario General de los Trabajadores Municipales comenzó a ejercer en 1983 y a partir de allí, se desempeñó en el cargo casi sin oposición. Sin embargo, para poder acceder a dicho lugar debió ocupar otro que, hasta el día de la fecha, continúa practicando con licencia por cargo gremial. En el Distrito Sur, Ratner se “desarrolla” como técnico de mantenimiento y por ello, implica un costo laboral para los rosarinos de $209.064 mensuales.
No obstante, los puestos no finalizan ahí. Además, es Secretario Adjunto de la Federación Santafesina de los Trabajadores Municipales (FESTRAM) y Director del Instituto Municipal de Previsión Social. En otras palabras, una misma persona se desenvuelve en cuatro cargos distintos dentro del Estado.
El hombre que encabeza el sindicato se cruzó esta mañana con Nacho Russo en Radio Boing y aseguró que los ciudadanos “no pagan sus sueldos”, sino que lo abona la coparticipación que recibe el Municipio de la provincia. Y añadió que, en caso de depender de la población, “vendría bien un aumento”, aunque perciba $131.429,50 netos por mes.
La Municipalidad de Rosario tenía a marzo de 2021, último mes en el que se presentó un listado nominal, 10.665 empleados en sus diferentes plantas. De ellos, 4.639 pertenecen a la Secretaría de Salud y por eso, ya completaron el esquema de inoculación. Asimismo, según el gremialista, el 20% -aproximadamente- de los trabajadores municipales tendría comorbilidades, por lo que tendrían al menos una dosis.
En conclusión, el sindicalista planteó que los estatales “están en la primera línea de lucha contra la pandemia, sanitizando las veredas de hospitales y bancos e hisopado en los barrios”. No obstante, la verdadera primera línea -médicos, enfermeros, personal de geriátricos y trabajadores de centros de salud- ya están inmunizados contra el Coronavirus.
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