La pandemia de coronavirus sirvió en algunos países para recortar derechos y libertades y para que sus líderes afiancen su poder, además de agravar las desigualdades entre las naciones, advirtió este martes la nueva titular de Amnistía Internacional (AI), Agnès Callamard.
“La pandemia reveló con toda crudeza y agravó las desigualdades existentes entre los países y dentro de las fronteras nacionales ha puesto de relieve el tremendo desprecio de nuestros dirigentes por el bien común de la humanidad”, lamentó la dirigente, que trazó un cuadro severo con “un mundo sumido en el caos” y sistemas sociales, económicos y políticos “desmoronados”.
Para la jefa de AI, algunos gobernantes “han intentado normalizar las autoritarias medidas de emergencia que han adoptado” y hay incluso quienes vieron en la pandemia una “oportunidad” para “afianzar su poder”.
Agnès Callamard, inlassable trouble-fête des autocrates https://t.co/PrpnhnfHaE pic.twitter.com/QJOZiSUig0
— L’Express (@LEXPRESS) April 6, 2021
La referente francesa citó los casos de Hungría, Arabia Saudita, Bahréin, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait y Omán como ejemplos de países en los que se adoptaron medidas que restringen libertades, entre ellas las de cuestionar a los gobiernos.
También mencionó casos de violencia policial en Filipinas, Nigeria o Brasil, país este último en el que los abusos de las fuerzas de seguridad habrían aumentado durante la emergencia sanitaria al punto que AI estima que la Policía mató entre enero y junio de 2020 a una media de 17 personas por día, lo que da un total de más de 3.100 en total.
Comentarios