Este viernes se llevó a cabo la audiencia imputativa de la familia que amenazó telefónicamente a los integrantes de la Fiscalía Regional de Rosario. Como resultado de la instancia judicial, el joven de 20 años y su madre recibieron prisión preventiva por el plazo de ley. De esta manera, el adolescente, imputado en carácter de autor, estará privado de su libertad por al menos dos años. La mujer, en tanto, por 60 días.
Así lo explico el Fiscal de la Unidad de Flagrancia, Franco Carbone, quien especificó: “Son dos personas con antecedentes. Teníamos una suma de indicios que nos permitió llegar hasta aquí, con el grado de participación que le dimos a cada uno. Él confesó haber hecho la llamada, pero como no logramos ahondar en el móvil”.
En la misma línea, el letrado explicó que descartaron la hipótesis basada en una “broma”: “Aún no sabemos el por qué, pero admitió el hecho. La Fiscalía continúa investigando lo que hay detrás de la comunicación. También, se corroboró que no pertenecía a ninguna banda”.
Por otra parte, el abogado reveló que la adulta había estado encarcelada durante cinco años y seis meses por “robo calificado con uso de arma”. “Ahora, decidimos imputarla porque su participación fue necesaria. Si no aportaba el dispositivo, no se podría haber cometido”, concluyó.
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