Los vidrios de la estación Puma en Oroño y Lamadrid quedaron estallados. No hubo heridos y dejaron una nota.
En la noche del miércoles 29 de mayo, dos hombres en moto dispararon contra la estación de servicio Puma de Oroño y Lamadrid, en la zona sur de Rosario. El hecho se convirtió en noticia de impacto mundial, porque además de los cuatro balazos dejaron una nota firmada por “Los Rosarinos” que mencionaba a Ángel Di María. Y porque eso pasaba en el final de un día que ya había arrancado con la novedad de que había sido vandalizado un mural en homenaje al 11 de la selección en “El Torito”, el club en el que “Fideo” jugó de chico, antes de hacer las inferiores en Central. Hechos que se suman a la balacera con amenaza incluida en marzo pasado, en la puerta del country en el que los Di María tienen una casa.
Aquella vez, el intendente Pablo Javkin y el gobernador Maximiliano Pullaro hicieron trascender que se habían comunicado con la familia Di María. Y en poco tiempo, el MPA había logrado dar con los autores de ese hecho, que tuvo impacto mundial como el de este miércoles. Los autores de aquella balacera fueron imputados y esperan en prisión el jucio por intimidación pública. Los que atacaron la estación, aún no pudieron ser capturados.
Lo que se sabe de la investigación es que un rato después de la balacera contra la estación la policía reportó el hallazgo de una moto roja, descartada en Flammarion y Lamadrid a unas cinco cuadras del ataque a la Puma. Lo informó este jueves Natalio Marciani, director de la PDI, que también sostuvo que no hay certeza absoluta de que el vehículo sea el mismo. Por otro lado, Marciani indicó que los balazos fueron cuatro y confirmó la existencia de una nota mencionando a Di María, aunque no quiso precisar si existe vinculación entre la vandalización del mural con el ataque a la estación: “Es todo materia de investigación, que está a cargo del fiscal Franco Carbone“, planteó el jefe de la Policía de Investigaciones.
Este jueves, mientras participaba de anuncios por otro tema en Santa Fe, el gobernador Pullaro fue consultado sobre la amenaza a Di María: “Quieren instalar el miedo y no lo van a lograr. Vamos a detener a los responsables como ya lo hicimos en marzo pasado con el primer hecho”, dijo. Y aunque es prematuro aventurar quiénes fueron los responsables, puede decirse que la nota que dejaron los gatilleros atribuyó el ataque a “Los Rosarinos”, banda presuntamente liderada desde una cárcel federal por Alan Funes. Y a ellos se los imputó por la saga de incendios de autos con bombas molotov en Rosario el mes pasado. La causa que lleva adelante Carbone deberá determinar si en la balacera a la estación de servicio de anoche actuó el mismo grupo.
Las preguntas, más allá del avaance en materia judicial, giran en torno a la decisión que tomará el actual jugador de Benfica en este contexto: ¿Vendrá a Rosario Central a jugar durante seis meses como se había rumoreado en las últimas semanas? ¿Irá al Inter Miami con Messi y Luis Suárez? La última declaración pública sobre esta última chance la dio Gerardo “Tata” Martino, técnico del equipo de la MLS, que afirmó que la franquicia ya tenía límites en su presupuesto. Esto quiere decir que para incluir a “Fideo” entre los de rosa, los de la Florida deberían desprenderse de algún otro jugador.
En Central, entre tanto, hay hermetismo. Desde que Gonzalo Belloso llegó a la presidencia del club, expresó públicamente su deseo de tenerlo en el plantel y cada vez que se le preguntó dijo que primero había que “poner en orden el club”. Los de Arroyito hicieron obras en el estadio, salieron campeones, llegaron a copas internacionales y se pusieron al día con las deudas. Con Miguel Russo otra vez en el banco de suplentes, el plantel se potenció y para este segundo semestre de 2024 acaba de anunciar además el regreso de Marco Ruben, que alcanzó a jugar con Di María en sus comienzos en Primera División. Y ahora, tras haber quedado afuera de la Libertadores, queda por delante un repechaje de la Sudamericana por los 16avos de final, en julio y después de la Copa América.
Hasta acá, había habido señales sobre una posibilidad real de que Fideo vuelva, que fueron alimentando la ilusión de los hinchas. De hecho, cuando Central armó la lista de buena fe para la Libertadores, dejó libres los números 9, 11 y 22, este último ante la chance de que Franco Cervi decida también volver a la Argentina. ¿La chance se cae por las amenazas? Lo saben sólo Di María y su entorno familiar. Lo concreto es que el 30 de junio -en exactamente un mes- finaliza el vínculo del 11 de la Scaloneta con el Benfica portugués y que cuando eso pase, estará jugando la fase final de la Copa América en Estados Unidos.
Ya desde que estampó su firma con el club de Lisboa, a mediados de 2023, la ilusión en Rosario siempre fue que su próxima escala sea el Gigante, al menos por unos meses. Y así se siguió con expectativa cada declaración suya o posteo en redes. En marzo, cuando parecía que la vuelta a casa estaba cerca, un hombre y una mujer le dejaron una amenaza en Funes, en la puerta del country donde la familia del crack de la selección tiene su casa. Esta semana, cuando volvía a sonar fuerte la posibilidad e inclusive varios medios deportivos a nivel nacional lo daban por hecho, se produjeron estos dos nuevos hechos: en uno de ellos, el del mural, se sumaron panfletos con cargadas de Newell’s.
“¿Es folklore o es la problemática narco que complica a la ciudad”?”, le preguntaron los periodistas a Natalio Marciani. “No puedo asegurar ninguna de las dos cosas”, dijo el jefe de la PDI. Desde la Municipalidad, el propio Javkin había dicho este miércoles que su deseo es que “los campeones del mundo rosarinos puedan volver a jugar acá, más allá de la camiseta”. Lionel Messi tiene contrato hasta 2025 en el Inter y Di María aún no definió su continuidad con ningún club más allá del mes que viene. ¿Podrá haber algún clásico que los enfrente en Rosario? Es otra pregunta que nadie puede responder a esta hora.
Antecedentes: la balacera al supermercado y la bandera de “Los Monos”
En marzo de 2023, cuando el que tenía un destino incierto en su carrera era Leonel Messi, el supermercado de sus suegros fue atacado con 14 disparos. Tiempo después, el 10 de la selección firmaba contrato para dejar el PSG e irse a Miami. Hubo detención de los autores del hecho y la causa judicial encontró que la balacera había sido encargada por una facción de Los Monos liderada desde la cárcel federal de Rawson por Pablo Nicolás Camino: un narco que disputaba con Guile Cantero el liderazgo de la organización criminal y de los negocios vinculados a la barra de Newell’s.
Unos meses más tarde, en junio de 2023, Di María y Messi pisaron juntos una cancha en Rosario: fue en el Coloso del Parque para la despedida que Maxi Rodríguez organizó en junio del año pasado. Esa vez, los hinchas de la Lepra ovacionaron a “Fideo”, aunque pocas horas después del partido amistoso una causa judicial iba a terminar opacando la fiesta: un enorme telón que desplegó la barra de Newell’s cuando los planteles posaban para la foto mostraba la imagen de un mono, un toro y un pollo. Los fiscales del MPA llegaron a determinar que se trataba de Guille Cantero, Damián “Toro” Escobar y Leandro “Pollo” Vinardi, cabecillas de la banda Los Monos presos en una cárcel federal.
El mensaje de ese trapo decía “Más allá de todo” y fue exhibido con Di María y Messi en la cancha, delante de miles de personas y durante una transmisión televisiva que se vio en todo el planeta. Por lo que pasó ese día, también hubo fuertes imputaciones penales, con investigación de los fiscales Schiappa Pietra y Edery, que incluyó los audios desde la cárcel con los que se tramaba la acción de la bandera. La expectativa ahora, para poder soñar en serio con un regreso de los dos campeones del mundo a la ciudad, se pueda encontrar rápidamente a los responsables de la nueva amenaza.
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