Franco “Milanesa” Almaraz, preso en Coronda desde julio de 2020, manejaba una banda narco desde la cárcel. Afuera, el grupo era gerenciado por su mujer, que administraba un búnker en Bielsa al 6400, Empalme Graneros: desde allí, distribuían a varias localidades. Ese domicilio había sido baleado varias veces y contaba con una custodia con armas para repeler un posible ataque. Con esa información, la fiscal federal Soledad García solicitó allanamientos al juez Marcelo Bailaque: el operativo se realizó durante la noche de ayer y la madrugada de este viernes, con el saldo de catorce detenidos.
El punto de acopio del grupo estaba en Bielsa al 6400, donde se hizo uno de los allanamientos. En esa cuadra se habían repetido varios hechos violentos en los últimos años. En 2022, inclusive, murió un vecino por una balacera. Allí, en el operativo de anoche, se irrumpió de forma sorpresiva y se logró dar con Rocío B., pareja y madre de los hijos de Almaraz, que resultó detenida.
De acuerdo a lo que pudo detectar la fiscal García, la mujer tenía personas a su cargo con las que organizaba la venta de droga desde su casa en el barrio de Empalme Graneros. Durante la investigación se pudo advertir que tenía tres punteros narco que vendían en la localidad de Coronel Bogado y se logró armar el esquema de comercialización: quienes proveían la mercadería a la banda también están presos, en Coronda y en Piñero.
En total, los allanamientos fueron quince: hubo irrupciones en Rosario, Funes, Coronel Bogado y Granadero Baigorria, más requisas en las cárceles de Piñero y Coronda. Otro dato llamativo con el que cuenta la justicia, confirmado por escuchas telefónicas que realizaron en estas semanas, es que la mujer de “Milanesa” tenía una custodia con armas en el bunker de calle Bielsa.
Como saldo del operativo, se secuestraron dos pistolas calibre 40, más de un kilo de cocaína, marihuana, dos autos y una moto, además de diez millones de pesos en efectivo, joyas, teléfonos celulares y balanzas de precisión.
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