A horas del comienzo de una nueva edición del clásico rosarino, se registró una nuevo hecho de violencia. En esta oportunidad fue vandalizados un murales de Newell’s, ubicado el otro en el predio ‘Malvinas’, donde normalmente juegan las divisiones infantiles del equipo leproso.
En las instalaciones donde compiten las categorías juveniles de Newell’s, normalmente ahí juegan partidos de los diferentes torneos de la Asociación Rosarina de Fútbol, fue vandalizado uno de los murales que habían pintado los hinchas leprosos.
Este sábado por la mañana, al arribar al lugar, notaron que habían realizado la metodología para quemar las paredes donde los fanáticos realizaron las ilustraciones. Rociaron con alcohol la pared para luego prenderla fuego.
Durante la semana, hinchas de los dos equipos actuaron y vandalizaron pintadas contrarias. Primero había sucedido el jueves en el colegio de la Sagrada Familia, donde una intervención rojinegra había sido arruinada.
En la madrugada del viernes, en Avellaneda al 300 bis, a unas 12 cuadras del Gigante de Arroyito, hinchas leprosos atacaron una pintada canalla, incendiando la pared con neumáticos. Por su parte, fanáticos del equipo ubicado en Arroyito arruinaron la fachada del local oficial de Newell’s, ubicada en Mendoza al 3500.
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