El 22 de junio de 1986 jugaban Argentina e Inglaterra en el Estadio Azteca por los cuartos de final del Mundial de México cuando el jugador número 10 de la selección del país sudamericano se transformó en el referente máximo del fútbol.
Los dos países que disputaban este encuentro protagonizaron una guerra por las islas Malvinas cuatro años antes que culminó con la capitulación argentina el 14 de junio luego de la batalla de Puerto Argentino. 649 argentinos perdieron la vida en el Atlántico Sur y muchos ex combatientes se suicidaron en el continente al sentirse marginados por un Estado que les dio la espalda.
Diego Armando Maradona por ese entonces tenía 25 años y venía de disputar su segunda temporada en el Napoli, un equipo del marginado sur italiano que gracias a ese hombre de 1,65 m vivirá su días de gloria deportiva. El 10 llegó al mundial de México 86′ en plenitud futbolística y física gracias a la preparación de Fernando Signorini.
Argentina disputó el Grupo A junto a Italia (campeón de España 82′), Corea del Sur y Bulgaria. La selección capitaneada por Maradona debutó ante los coreanos con un triunfo por 3 a 1, luego siguieron un empate ante los italianos 1-1 con un golazo del Pelusa y una victoria ante Bulgaria por 2 a 0.
En octavos de final, se jugó el clásico rioplatense ante Uruguay y el combinado nacional pasó a cuartos tras vencer por 1 a 0 con gol de Pedro Pablo Pasculli.
En la previa del partido hubo enfrentamientos verbales y trompadas entre los hooligans ingleses y los barras argentinas en medio del rencor que había dejado el conflicto bélico de cuatros años atrás.
El primer tiempo terminó con el partido 0 a 0 y dejó algunas perlitas como cuando Diego antes de ejecutar un córner arrancó el banderín y fue obligado por el juez de línea a ponerlo en su lugar.
En el minuto 6 del segundo tiempo, Maradona agarró la pelota fuera del área y se la pasó, entre varios defensores ingleses, a Jorge Valdano, quien intentó controlar la pelota, pero Steve Hodge pifió el rechazo y la pelota fue para atrás.
Maradona estaba en offside, pero por venir la pelota de un contrario fue correctamente habilitado. Ya dentro del área y con el balón cayendo, Maradona fue en su búsqueda a la par del arquero Peter Shilton, 20 centímetros más alto que él. Shilton saltó adelantando su mano derecha, al mismo tiempo que Maradona lo hacía con el brazo izquierdo extendido. El puño de Maradona, cercano a su cabeza, golpeó antes el esférico, que rodó hacia dentro del arco. Maradona comenzó a festejar, mirando de reojo al árbitro y al juez de línea que convalidaron el gol mientras él corrió hacia el sector donde estaba su papá Don Diego y en voz baja dijo: “Pa, le robe la billetera a los ingleses”.
4 minutos después, Maradona recibió un pase de Héctor Enrique en campo argentino y comenzó a gambetear a jugadores ingleses como si fuesen conos de entrenamientos. En total Diego eludió a Glenn Hoddle, Peter Reid, Terry Butcher, Terry Fenwick y el arquero Peter Shilton) y convirtió el mejor gol de la historia que lo catapultó como el deportista más querido por los argentinos y como mejor jugador de la historia.
Este 2021 se cumplen 35 años desde ese histórico partido y se vive con particularidad ya que es el primero sin Diego Armando Maradona con vida luego de su muerte ocurrida el 25 de noviembre de 2020 en su casa alquilada en un country de Dique Luján.
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