A 17 años de la tragedia de Carmen de Patagones, el aula de la escuela Islas Malvinas de la localidad bonaerense, donde un estudiante mató a balazos a tres de sus compañeros e hirió a otros cinco, fue transformada en un espacio de resignificado de la educación pública con actividades para honrar la vida, informaron las autoridades.
La actual directora de la institución, Adriana Roumec, habló sobre el hecho sucedido en 2004, y dijo: “Nosotros no nos detenemos tanto en lo que nos pasó; lo que valoramos y fortalecemos en la escuela es lo que se logró a partir de lo que sucedió”.
Rafael Junior Solich, quien por entonces tenía 15 años, extrajo de sus ropas una pistola Browning calibre 9 milímetros, perteneciente a su padre, suboficial de la Prefectura Naval Argentina, y vació un cargador completo contra sus compañeros. La tragedia se dio en el interior del aula que durante dos años fue convertida en santuario.
En 2006, fue transformada en una sala de reuniones, mediante un trabajo realizado por la comunidad educativa, y donde el principal protagonista es el centro de estudiantes que desarrolla actividades para honrar la vida. “Así como resignificamos ese dolor, resignificamos este espacio”, añadió la directora al medio Télam.
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