La policía de Australia anunció el descubrimiento de más de 200 kilogramos de cocaína escondidos en el casco de un buque de carga que arribó a Melbourne después de su viaje desde Argentina vía Nueva Zelanda. Este no es el primer incidente de contrabando de cocaína procedente de Argentina detectado por las autoridades australianas, ya que en mayo pasado confiscaron 800 kilos de cocaína en un buque que había cargado granos en la terminal portuaria de Renova de Timbúes, bajo la jurisdicción de la Aduana de San Lorenzo.
El buque involucrado en este último caso, el Chemstar Sapphire, visitó varios puertos argentinos, incluyendo San Lorenzo, Campana y Quequén. También estuvo en puertos de Santos (Brasil) y Montevideo (Uruguay). La investigación está en curso y las autoridades argentinas trabajan en colaboración con la Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar) para determinar cómo se llevó a cabo esta operación de contrabando.
La Policía Federal Australiana (AFP) informó que el valor de la cocaína incautada se estima en alrededor de 80 millones de dólares australianos, lo que equivale a casi 51 millones de dólares estadounidenses. La investigación busca identificar y localizar a los grupos transnacionales de delincuencia organizada responsables de este contrabando, así como a las personas involucradas en la recepción y distribución de la cocaína en Australia. Las autoridades australianas consideran que este método de ocultación no es nuevo y demuestran su determinación en combatir el tráfico de drogas ilícitas en el país.
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